[DANA]
Llevaba todo el camino pensando en lo mismo.
¿Qué pasaría cuando Axel me viera?
¿Y si seguía molesto conmigo? ¿Y si aún no me había perdonado por alejarme tanto de él y quedarme a vivir en Italia? O peor... ¿Y si Daniel y yo no podíamos disimular por tanto tiempo lo que sentimos y se daba cuenta?
¡Sería todo un desastre!
Yo en lo personal lo amarraría a una silla eléctrica.
Digo, primero porque es el exesposo de su esposa y, segundo, porque se metió con su hermana.
¡Mi pobre idiota no viviría para contarlo!
Pero cualquier cosa que pasara, no lo haría, no terminaría con Daniel y tampoco me alejaría de nuevo de Axel.
Mi teléfono comenzó a timbrar, por lo que tuve que parquearme a un lado de la calle para contestar; al parecer alguien me extrañaba lo suficiente como para llamarme quince minutos después de separarnos en la cochera.
—¿Hola, cielo? ¿Olvidaste algo?— contesto normal.
Nadie habla al otro lado de la línea, por lo que creo que quizá el teléfono se le marcó por error; sin