La luz del atardecer se filtra por las ventanas iluminando el lúgubre sentir de la alcoba.
Obcervo inexpresiva el rostro dormido del niño que se oculto en mis brazos hasta desfallecer, aunque aún puedo oír el eco de su llanto, ese que solo cesó después de mucho tiempo.
《 ...lo peor es que esto es solo el comienzo 》
Aún no sabemos la verdad sobre las circunstancias de su origen y si en realidad hay una madre esperando por él.
— ¿Cómo siguen? — la voz de Agata se hace presente y no se porque no me sorprende que ahora todos estén metidos aquí. Al parecer tienen a mi habitación como una sala de reuniones.
Y el que capté a lo lejos los leves susurros de la pareja qué habla como queriendo ocultar algo, me anuncia que esta tregua impuesta no durará mucho.
Se que tengo que solucionar todo lo ocurrido antes que se me vengan encima peores problemas, pero estoy tan cansada que solo quisiera, que de verdad, todos se vayan al demonio.
Por eso ni siquiera me esfuerzo en mirarlos, recostandome sobr