Capítulo XXXII...Conociendo al Capo de la Mafia...Parte I...
Y así la familia reunida se dispone a tomar el desayuno, mientras que en la Toscana Leonardo no quiere levantarse de la cama, Aryana se encuentra como loca tocando la puerta hasta que ve a Alessa llegar y hacerla a un lado como si fuera basura.
-¡¿Cómo te atreves?! ¡soy Madame Rossi!
-Acaso, ¿tienes un anillo nupcial en tu dedo? – Aryana queda en shock – que esperes un bastardo de Leonardo, no te hace Madame Rossi – abriendo la puerta
Pero en el acto, cierra la puerta en la cara de Aryana – ¡oye!
-Leonardo…es hora de levantarse
- ¡No! ¡no quiero levantarme!
-Suenas como todo un niño consentido, vamos a levantarse tienes juntas inaplazables
-Nana…no quiero
-Leonardo…tienes que hacerlo, no puedes dejar que la fortuna de los Rossi, decaiga, además con la zorra de tu amante gastando a diestra y siniestra
Y así Leonardo, de mala gana se coloca de pie y se arregla para marcharse. Cuando baja hacia el comedor ve una mesa bien puesta y a Aryana en el lugar que solía ocupar Adrienna –