Estamos en el hospital esperando noticias de Eric.
Más tarde, el doctor sale diciéndonos que afortunadamente, la bala no dañó ningún órgano y la pudieron sacar sin dificultad. El alivio que siento es inmenso. Es muy buen amigo. Jack también se siente aliviado, puedo verlo en su cara. Gracias a Dios, podrá recuperarse pronto.
Nos sentamos en la sala de espera.
— ¿Quién les ha hecho esto? —tengo curiosidad.
—No tengo idea, pero sea quien sea, lo voy a encontrar. —veo la rabia en su rostro.
— ¿Qué fue lo que pasó?
—Alguien colocó un explosivo en la última planta y dejó muchos daños. Cuando intentamos salir,