—Lo es… Edward tenemos que irnos de aquí de algún modo… tenemos que… —Antes de que Jacob, pudiera terminar de hablar, un ruido lo interrumpió.
Abruptamente un ruido de motor empezó a sonar, y Edward y Jacob, vieron como un automóvil se acercaba a ellos.
—Podrá ser —pensó Edward.
El automóvil se detuvo justo frente a Edward y Jacob y dentro de él… se encontraban David y María conduciéndolo.
—Los estábamos esperando —dijo María, en el asiento de conductor del vehículo.
—Ustedes… ¿Dónde estaban? Porque no estaban exactamente aq