— ¡La venganza por el Asesino Oculto debe cumplirse! ¡Y de paso recuperaremos ese objeto!
Los 5 asesinos restantes se pusieron de pie.
Los Siete Asesinos compartían gloria y desgracia, todos querían vengar al Asesino Oculto.
Era la primera vez que los Siete Asesinos se movilizaban colectivamente de esta manera, suficiente para conmocionar al mundo marcial.
— Creo que... no será necesario que vayan.
Una voz resonó repentinamente desde las sombras.
Los 6 asesinos mostraron sorpresa inmediata.
— ¿Quién anda ahí? ¡Sal!
De la oscuridad emergieron lentamente dos figuras, sus rostros pasando gradualmente de borrosos a nítidos.
— ¿Quiénes son ustedes? —preguntó con severidad el líder de los Siete Asesinos, entrecerrando los ojos.
Que estas dos personas pudieran aparecer allí sin que ellos lo notaran, era extraordinario.
— Soy precisamente a quien buscan —dijo Gabriel con calma mientras recorría con la mirada a los 6 asesinos.
— ¿Qué? ¿Tú eres Gabriel? —los 6 asesinos se sobresaltaron nuevament