Beatriz ya no pudo soportarlo más. En ese momento, su corazón se derrumbó por completo. No quería ver a Xavier arriesgar su vida para salvarla.
—¡Tonta! ¿Qué tonterías estás diciendo? Eso no va para nada con tu personalidad.
Xavier miró fijamente a Beatriz con lágrimas desbordándose de sus ojos, y s