Luxion como si fuera lo más normal, le devolvió la pregunta con voz suave - ¿qué haces tan tarde fuera de la cama?.
Niña - Necesito ir al baño, ¡llévame¡ - lo último, sonó como una orden. La ceja de Luxion crispó, pero aun así, para no levantar sospechas y hacer un escándalo antes de tiempo, se acercó y tomó su pequeña mano.
Luxion - bueno, vamos. ¿En dónde está?.
Niña medio sorprendida- ¿no sabes?.
Luxion - No, no sé. Dime a dónde ir.
Niña - bueno - levantó un dedo y señaló - para allá.
Caminaron juntos en medio de la noche. Atravesaron en silencio la inmensa oscuridad. Siguiendo las diversas indicaciones. Llegaron a una habitación de