-Muy bien, entonces muéstranos.- me dice Rafael soltándome de su poderoso abrazo. Veo a Chamuel y éste me asiente con la cabeza.
-¿Qué les muestre qué cosa?- les pregunto.
-Cómo invocaste tu espada.- me contesta Rafael como si fuera una cosa obvia mientras sujeta su collar enseñando claramente el pequeño dije.
Al instante un resplandor verde invade el recinto y un enorme martillo con un mango bastante largo aparece en la mano de Rafael. Me echo atrás por la sorpresa y por precaución que no me vaya a golpear con esa cosa sin querer.
-Así convoco yo el mío. Fácil.- alardea el mo