Nisha.
Sus manos me acarician con tanta suavidad que podría jurar que no lo hacen realmente. Dark está siento en extremo gentil y delicado y es algo que no se si agradecer o no. Sus labios besan los míos con necesidad, pero sin ser brusco, es como si hubiese deseado esto desde hace una eternidad y finalmente ahora que puede hacerlo no quiere perder ni un segundo.
– Nisha – susurra mi nombre pegado a mis labios en mitad del beso, mis ojos se abren para buscar los suyos y ellos solo puedo ver a un hombre deseoso de dar amor.
– ¿Qué pasa? – pregunto acariciando sus mejillas con mis pulgares.
– Si hacemos esto estamos poniendo un objetivo en tu cabeza, estas dispuesta a ponerte en riesgo – no lo dejo terminar
– Sssshhh – coloco mis dedos sobre su boca y sonríe, luego deja un cálido beso sobre la yema de mis dedos y continuo