Alexei
El silencio entre Aria y yo se ha vuelto insoportable. Cada vez que estamos cerca, siento que hay una guerra invisible entre nosotros, una batalla de palabras no dichas, de gestos que podrían ser interpretados de mil maneras. Cuanto más intento mantenerme alejado, más siento que me atrae. Y cuanto más me acerco, más veo lo que quiero evitar: esa mirada desafiante, ese fuego que se esconde detrás de su calma.
Ella sabe lo que está haciendo. Lo sé. Y yo también.
Cada interacción que tenemos es como caminar sobre una cuerda floja. A cada paso, siento que voy a caer. Pero no lo hago. Y ella tampoco. Porque ambos sabemos que, aunque nos estamos arrastrando por este abismo, no podemos detenernos. Estamos