Sofía.
Después de ese encuentro incómodo con mi hermano caminamos un poco mirando los aparadores de la tienda, las flores de una tienda llaman mi atención y me asen detenerme para poder verlas mejor, son orquídeas rojas solo había visto estas flores en libros y leí que son excelentes para relajar músculos moliendo las y aplicándola directamente en la zona, podría servir para algún golpe muy fuerte, torceduras e incluso un dolor de muelas.
-¿ te gustan estas flores ?
La voz de William me regresa a la realidad y me ase voltear a verlo con rapidez.
-solo admiraba su belleza.
-¿ las quieres ?
-no sé moleste.
William me mira con una leve sonrisa para hacerle una seña al vendedor.
-deseo esas flores por favor.
William paga las flores y me las entrega con una gran sonrisa.
-si algo te gusta deberías de pedirme lo.
-William me la podría comprar yo pero te agradezco el gesto.
Soy una mentirosa por apresurarme a salir se me olvido el dinero en mi mesita de noche además me encanto que se perca