Así empezaron a pasar los días, dando ya habia pasado una semana desde que Melissa llego a vivir en la humilde casa de los Holmes.

Justo en esos momentos Melissa estaba divertida jugando con Lottie, quien le enseñaba sus juguetes especiales que solo podía usar con el permiso de su papa, quien le dejo usarlos en esa ocasión especial para que jugara con la mayor.

- Mia mami – dijo Lottie mostrándole un cofrecito especial donde guardaba un poco de maquillaje que su papa le habia comprado.

- Wa, mira que lindos colores – hablo ella sacando un brillo labial color cereza.

- Nina gande.

- Vamos a arreglarnos entonces y te dejare preciosa.

- Mami, mía – menciono Lottie mostrándole en su Tablet un video donde una chica les enseñaba como hacer un peinado de una coleta con un lazo.

- Oh, pues no se ve difícil – menciono Melissa al ver el video - ¿quieres que te peine así?

- Si.

- Jeje puedo intentar, pero no tenemos cin…

- Mami – en eso Melissa se asombró al ver que la menor le mostraba otro cofrecito donde había cintas, moños y muchos adornos para el cabello que variaban de materiales y formas.

- Jajaja en verdad que estas bien preparada – hablo divertida – entonces vamos a peinarte – menciono sintiendo a la pequeña sentarse en su regazo.

Ella rio y empezo a peinarla con mucho cuidado empezo a peinarla y maquillarla, ambas estaban divertidas y no notaban que Alessandro estaba debajo del marco de la puerta observándolas donde buscaba sacarles algunas fotos y suspirar.

“Lottie ama todos los juguetes especiales que le compraste mi amor” – pensaba mirando la emoción de su pequeña al escoger los moños y pasadores para su cabello, ya que en su momento su esposa compro miles de eso y siempre decía que cuando jugara a las fiestas de té con su princesita también se peinarían y maquillaran para esa ocasión, por lo cual el busco comprarle ese maquillaje especial a su pequeña para cumplir el deseo de su esposa.

- Y listo – dijo divertida Melissa terminando de hacerle un peinado especial a la menor para colocarle un gran moño color azul rey con pedrería – ya está lista – indico tomando un espejo para que la pequeña viera su reflejo.

- Sii, gacias mami – menciono ella abrazándola con fuerza.

Melissa sabía que estaba mal que dejara que ella le llamara así, pero otra parte estaba feliz de que esa confusión se presentara porque en verdad deseaba tener a la menor para ella.

- Bueno a ver ahora vamos a pintar tus labios – menciono tomando el estuche de pinturas donde se asombró al ver que era maquillaje especial para niños y con cuidado maquillo a la menor, quien se miraba feliz de recibir esos mimos y buscar imitar a la mayor al ver como la maquillaban.

- ¿Qué hacen? – justo en eso vieron que el rubio ingreso a la habitación sonriendo al ver a que pequeña arreglada y maquillada.

- Api, mia Lottie pinesa.

- Princesa – corrigió mirando que sonreía – y para esta princesa traje algo especial – menciono dando un paso atrás para tomar un pequeño carro de madera donde había tazas de té, platos, una tetera y una canasta con galletas – ya que están arregladas ¿celebramos una fiesta de te?

- Siii – dijo feliz la menor.

- A ver muevo esto para poner las cosas – dijo Melissa haciendo a un lado con cuidado las cosas de la pequeña para que usaran la pequeña mesita que habia en la habitación para poner las cosas.

Tras acomodar las cosas los 3 empezaron a beber un poco del té de moras que preparo Alessandro e igual comían las galletas de sabor vainilla y chocolate.

- Hace rato escuche que te llamaron – menciono Melissa quien noto que el rubio las estaba observando desde lejos hasta que empezo a sonar un teléfono - ¿paso algo?

- Todo en orden, solo fue una consulta sobre el expediente de uno de los pacientes recurrentes del hospital.

- Ah ya.

- A veces es inevitable, pero bueno no puedo quejarme de mi trabajo.

- Eso si – hablo Melissa tomado otra galleta disfrutando de su sabor.

- Lico – menciono feliz la menor tomando una galleta.

- ¿Caseras o de tienda? - pregunto Melissa alver que tenían diferentes formas.

- Tienda, son de una panadería local.

- Hehe están lindas porque tienen diferentes formas.

- Por eso estos polvorones son muy populares.

- Api ¿jugar? – pregunto Lottie mostrándole el estuche de maquillaje.

- Claro, ya estoy aquí para jugar con ustedes – menciono al ver la emoción de su pequeña donde se dejó hacer por ella.

Melissa igual rio y busco ayudar haciéndole algunas trenzas al cabello del rubio para que la menor pudiera ponerle los pequeños adornos en su cabello, al mirar de reojo al rubio notaba que él estaba feliz y calmado dejándose hacer.

- Mami oto – Lottie le pidió otro de los adornos de cabello a Melissa.

- … - Melissa se preocupó un poco al ver que el ceño del rubio se frunció ligeramente, pero vio que no opino nada - aquí tienes – le dijo sacando un pequeño adorno en forma de corazón.

- Acias – indico feliz tomándolo para colocarlo en los cabellos de su papá.

Alessandro solo miro la relación entre ambas pelinegras dejando escapar un suspiro mientras se dejaba hacer por su pequeña, tras un rato de juegos dieron las 2 de la tarde y el estómago de Lottie le recordó que no habían almorzado, por lo que dejaron todo para ir al comedor para comer donde ellas se ofrecieron para acomodar la mesa colocando los platos y cubiertos mientras que Alessandro servía la comida.

Tras eso comieron en un agradable ambiente escuchando las pláticas de la menor al jugar.

- Y sabes api, mami hizo el peio de video – indico feliz la mejor señalando su peinado.

- Hm… se ve que mami es talentosa – contesto notando que la pelinegra se miraba algo apenada.

- Si jaja.

- Jeje termina de comer Lottie no vayas a atragantarte – indico Alessandro al ver la diversión y emoción de su pequeña.

- ¿Y tú qué hiciste Alessandro? – pregunto Melissa.

- Además de la comida les hice algo especial, aprovechando que Lottie estaba entretenida – menciono colocándose de pie para ir a la nevera de donde saco unas gelatinas con fruta.

- ¡Siiii! – dijo emocionada Lottie tomando una cuchara mientras recibía una gelatina de color rojo con trozos fresas en su interior.

- Se ve rico – dijo Melissa al recibir la suya – gracias – indico al recibir la suya.

- De nada, las gelatinas con frutas son las favoritas de Lottie y gracias a que estaba jugando contigo hoy si tienen muchas fresas – menciono escuchando la risa de su pequeña, ya que ella cada que podía tomaba algunos pedacitos de fresas para asegurarse que estuvieran dulces.

- Ah, es decir, que esta jovencita no es buena sub chef – menciono divertida Melissa mirando a la menor disfrutar su gelatina.

- No jaja – menciono Alessandro mirando las caras de su pequeña.

Melissa rio ante eso y empezo a disfrutar de la gelatina donde miraba la emoción de Lottie al conseguir un pedazo de fruta para comerlo.

Tras acabar el postre Alessandro les acomodo en sofá para que se recostaran para leer un cuento en lo que él lavaba los platos sucios.

- Y entonces el mago apareció y empezo a recitar un poderoso conjuro y… - estaba leyendo Melissa, pero en eso noto que la menor ya se habia quedado dormida – hehe y ya luego veremos que paso – hablo marcando el libro para mover con cuidado a la pequeña y acomodarla para que durmiera cómoda – descansa Lottie.

- Parece que la cansaste, ya que se durmió rápido – opino Alessandro, quien se acercó hasta ellas con una caja de color rosa y blanco.

- Si jeje fue divertido jugar y… - en eso ella vio que el rubio le pasaba una toallita – am ¿eso?

- Para limpiarte – menciono acercándose a su pequeña para desmaquillarla con cuidado y quitarle los adornos de cabello.

- Ah gracias, hehe me sorprende que estes preparado – menciono empezando a limpiarse el maquillaje.

- Me gusta ser precavido – menciono divertido terminando de limpiar a su pequeña, para ahora limpiar su cara.

- Am… oye Alessandro – empezo a decir nerviosa - sobre lo de hace rato, vi que no te pareció que ella me llamara mami y yo…

- Solo contéstame ¿fue cosa tuya o de ella?

- De ella.

- Entonces no tienes por qué disculparte.

- ¿Eh? en… ¿en serio?

- Si, ya que creo que es natural que por su edad mi hija desee una madre – menciono haciendo una mueca - ya que ella siempre ve que sus amigos en la guardería con sus madres y ella solo me tiene a mí.

- Pero tú eres un gran padre, no muchos niños pueden decir que su papá les cocina y hace comidas cute – menciono ella – o igual que digan que su papa juega a maquillarse y peinarse con ellas – hablo mirando que el rubio le quitaba los adornos para guardarlos.

- Lo sé, pero a veces me es difícil compararme con una mujer en ese aspecto – indico acomodando mejor las sábanas y peluches para que durmiera más cómoda.

- Creo que estas dejando que tus miedos hablen – indico ella tomándolo de las manos – porque en este tiempo juntos puedo ver el gran ser humano y excelente padre que eres, así que no te menosprecies.

- Gracias Melissa.

- Hehe y hablo con la verdad.

- ¿Segura?

- Así es, esta es una hermosa y pequeña familia a la cual deseo unirme.

- Je… entonces ¿si vas en serio con eso?

- Mucho doc – dijo ella divertida.

- Jaja eres interesante.

- ¡Hey!

- En el buen sentido – hablo ella divertida guiñándole el ojo.

- ¿Y cuál sería el sentido malo?

- Creo que luego lo descubriremos no crees – hablo en un tono coqueto ella.

- … - Alessandro solo sonrió y negó divertido – dejemos que el tiempo hable, por cierto, iré a mi habitación a limpiar un poco ya que al rato iremos al supermercado a surtir la despensa.

- Oh, saldrán.

- Si ¿quieres acompañarnos?

- Claro – dijo feliz mirando que el rubio le sonreía antes de girarse e ir a su habitación.

Melissa vio que él fue a limpiar, por lo que aprovecho a acomodarse un rato en el sillón para revisar su celular donde vio que su padre le estaba escribiendo en esos momentos, por lo que busco abrir el chat para ver que escribía.

“Melissa ven a casa”

“Aun no puedo”

“Ven, es una orden jovencita, aquí en casa estarás a salvo porque aún no sabemos quién te quiso atacar… pero te aseguro que lo matare”

“Por eso te amo papi, pero digamos que no regreso porque encontré algo que quiero”

“¿Qué cosa?”

“Encontré a tu nieta y a tu nuevo yerno”

“¿Qué? ¿a qué te refieres hija?”

“Ah eso, encontré una pequeña familia que deseo hacer mía” – escribió y busco anexar una fotografía que les habia tomado a escondidas.

“No…”

“No puedes negarte, además gracias a esa hermosa princesa estoy viva”

“Supongo que ante ese argumento no puedo objetar ¿verdad?”

“Nop”

“Ok ¿cuándo la traes?”

“Aun no sé, pero quiero que le pidas ayuda a Max, porque para obtener lo que quiero hare que me firme un contrato matrimonial especial, porque ellos tomaran nuestro apellido por obvias razones”

“¿Vas en serio?”

“Mucho”

“Ok, ya pido que hagan los arreglos y cuídate mucho ya que Atenea me dijo que está empezando a ver un movimiento extraño por cerca de la zona donde estas”

“Gracias papá, igual Atenea ya me paso mis armas y estaré alerta ante todo”

“Aquí igual seguimos alerta y ordenare para mandar algunos hombres más cerca de tu posición para cuidarte”

“Entendido, igual yo estaré alerta”

“Por cierto, también quiero que me mandes los datos de ese maldito… porque nadie te hace llorar y vive para contarlo”

“Te los mandare, pero prométeme que solo lo atraparas porque yo quiero ser quien lo mate y lo haga sufrir”

“Está bien, pero yo le doy el golpe de gracias”

“Trato”

“Bueno tu cuídate y ya te mando algo especial para mi nieta”

“Se que Lottie amara recibir un regalo tuyo”

Melissa sonrió al leer ese mensaje y dejo escapar un suspiro antes de colocarse de pie y recostarse junto a la pequeña para dormir un poco, donde por inercia la menor se giró y termino abrazada a ella sonriendo entre sueños.

Tras un rato Alessandro fue a revisarlas notando que dormían abrazadas, por lo que busco acomodarlas y taparlas con una manta.

- Parece que pronto esta escena será cotidiana ¿verdad? – susurro el rubio sonriendo al ver a ambas descansar, mientras se alejaba un poco para llamar a sus subordinados para escuchar un reporte detallado de la situacion.