—Lamento mi comportamiento barbárico, mis bolas me gustan dónde están, soy Jason Curtis.
—Hola, Jason, un gusto.
Los bomberos se alinearon para verla y Olivia reía encantada, Nicholas, aunque estaba aliviado de verla superar su miedo inicial y abrirse a sus compañeros, parecía haberse comido un limón. Sin embargo, ella daba pasos hacia ganar confianza y no haría nada para que se sintiera asustada o incómoda.
Para todos, la forma de actuar de su amigo no pasó desapercibida. Sabían de su relación con Christian, por eso era curioso.
—¡Bueno, ya!, vayan a revisar el equipo.
—Ya lo revisamos.
—Vayan de nuevo, entonces.
—Bien, bien…los dejamos a solas.
Olivia se le quedó mirando fijamente y Nicholas supo que podría perderse en esos ojos azules. La miró con atenció