— Y bueno mi princesa vamos hacia la mesa para que puedas apreciar tu sorpresa más de cerca ¿que dices? —Sonrió
Yo enseguida volteé hacia dónde estaba la mesa y la silla y todo estaba tan bonito, luego volteé nuevamente a ver a Maximiliano mientras sonreía de felicidad y le dije!
— Claro que sí mi amor vamos, quiero estar junto a ti en este maravilloso lugar
Maximiliano me toma de la mano y camina junto a mí hacia la mesa dónde había preparado esa hermosa y romántica cena bajo la Torre Eiffel, mi gran sueño se había cumplido. Maximiliano me abre la silla y yo enseguida me senté y comencé a ver a los señores que estaban tocando esa hermosa música que me encantaba
Enseguida continúe observando a Maximiliano con aquella sonrisa y mirada que no podía ocultar, pues mi felicidad salía hasta por los poros de mi cuerpo, así que de inmediato Maximiliano me observa toma mi mano y me dice:
—¿ Te gusta mi amor? ¿Te gusto esta gran sorpresa que te tenía para ti? ¿Y ahora sí entendiste por qué no