Después del desayuno, Zachary transfirió otros 50.000 euros a Serenity.
Serenity vio el dinero que había transferido y dijo: —No me falta dinero.
Nunca faltaba dinero en la tarjeta que él le daba.
—Estoy fuera de casa en viaje de negocios, y no se sabe cuándo volveré. Ya casi es Nochevieja, y necesitas dinero para todas las compras de Año Nuevo, así que puedes utilizar estos dineros para comprar las compras de Año Nuevo.
El razonamiento de Zachary era convincente.
—Vamos a volver a mi ciudad natal para el Año Nuevo. Hay muchos parientes en la antigua mansión, así que necesitamos enviar muchos regalos, pregúntale a la abuela qué enviar y cómpralo por adelantado, si estos 50.000 euros no son suficientes, puedes decírmelo y te transferiré algo de dinero.
Al oírle decir esto, Serenity no tuvo más remedio que aceptar los dineros.
Después de casarse, era la peimera vez que él mencionó llevarla a su antigua mansión.
Previamente, al reunirse con los padres, había avisado a sus padres, tíos y t