Amira
Despierto y de inmediato las luces blancas hacen que mis ojos se cierren, poco a poco me voy acostumbrando a la luz, el sonido de maquinas a mi alrededor me hace saber que estoy de nuevo en el hospital, los recuerdos llegan a mi memoria, cai sobre el suelo y todo se puso negro.
— Has despertado — me dice una voz a mi lado, el doctor chequea mis intravenosas y anota algo en una carpeta — Toda tu familia esta allá afuera, tienes unas cuantas horas inconsciente, pero vas a estar bien Amira solo es una baja de vitaminas, te recetare hierro y otras cosas, más una buena dieta, balanceada y saludable, y en poco tiempo ya estaras recuperada, lo prometo.
— Gracias doctor — le digo con voz adormilada.
— Ya no es