Laila Carter Me sentía verdaderamente nerviosa porque no sabía si a quién iba a venir si venía con otras intenciones más que escucharme. Bajé las escaleras con cuidado había convencido a Jesús de salir de su habitación y hablar con Sasha aunque estaba segura que no le diría la verdad al menos hablaría con ella y la tranquilizaría un poco. Al llegar a la sala me encontré con mi hermano pensativo estaba en completo silencio y mirando a la nada, sabía que él tenía sus propios problemas pero en este momento necesitaba que pusiera toda su atención en lo que podría suceder hoy.— ¿Estás bien?— Le pregunté sacándolo de sus pensamientos.Él me miró y suspiro — Le dije todo a Sasha — aquello si me tomó por sorpresa — Le dije lo que me iba a suceder tarde o temprano, le que sería una especie de híbrido pero de la peor manera— ¿Y que te dijo?— Le pregunté cuando él se quedó en completo silencio — No dijo nada así que solo salí de la habitación supuse que ya necesita tiempo para entender lo
Laila Carter No sabía si era momento de decirles todo lo que ya sabía, no sabía si era este el momento indicado ellos estaban a la defensiva eso estaba bastante claro quizás eran demasiadas noticias malas para ellos al menos y esto que tenía para decirle solo iba a empeorar la situación. — Laila nos caes muy bien, pero así son las cosas la mujer es la luna es la que le da el equilibrio a la manada por eso existe una luna y un alto porque el alfa es la agresividad es la protección mientras que la luna solamente es la calma de la manada y no puedes simplemente cambiar las cosas porque tú y tu familia creen ser los importantes creen estar por encima de cualquier cosa— me dijo uno de los alphas, al menos agradecía la calma con la que lo estaba diciendo. — yo no me creo nada te lo aseguro y sé que el resto de mi familia tampoco se creyó en ningún momento por encima de nadie nosotros hicimos lo que en su momento era correcto esta es nuestra y por eso es correcto con la capacidad de trans
Laila Carter — ¿Estás diciendo que traicionemos al consejo?— Preguntó alguien después de un rato ¿Traicionar? no claro que no, esa no era la palabra correcta,— No les estoy pidiendo traicionar a nadie, les estoy pidiendo que piensen por ustedes mismos ¿Hasta cuándo quieren seguir haciendo lo que el consejo dice? Siempre poniendo incluso las prioridades del consejo antes que las suyas ustedes son los alfas de su manada ustedes saben las problemáticas de su manada pero siguen dejando que ellos tomen decisiones por ustedes— les dije con la intención de convencerlos sabiendo que había una baja probabilidad de que hicieran lo que yo les estaba pidiendo pero aún así no me rendiría. Era consciente que mi objetivo eran ellos mi objetivo tenía que ser derrumbarlos porque sabía que wilfran o el resto del consejo uno de ellos era la persona que había orquestado la muerte de Salomón y no solo eso era también la persona que quería hacer que comenzáramos a reproducirnos de forma exagerada solam
Maximiliano Jones Una vez que le arranque la cabeza a aquel alpha me senti más aliviado sabiendo que ya no amenazaba la vida de Laila ni mucho menos la de mis hijos, cuando solté su cabeza, busqué con la mirada a Laila sin embargo no la vi por ningún lado, de hecho la habitación estaba vacía, recordé que había escuchado que nos estaban atacando por lo que rápidamente saque conclusiones.Al salir pude notar que todo estaba en silencio pero ahí están todos mirando al frente ¿Que estaba pasando? Aún como lobo caminé hacia el frente dejándome guiar por él olor de Laila y de mis cachorros en su vientre.Cuando la encontré ella miraba al frente ¿Que es lo que está pasando? Miré al frente también no podía con la sorpresa que tenía en este momento.Podría decir incluso que era una mezcla de sentimientos entre decepción y traición ¿Que hacía mi madre ahí junto a wilfrán?! No solo estaban ellos, también estaban los pálidos ¿Que les ofreció el consejo para que decidieran luchar?! ¿Por qué mi
Laila Carter Todo era un completo desastre apenas Maximiliano se lanzó hacia ellos y asesinó a su madre wilfrán pareció volverse loco lo que nos confirmó que lo que ella había dicho era real ella era la compañera de él los alfas para mi buena suerte comenzaron a pelear con los vampiros jamás había visto a un vampiro en mi vida y mucho menos sabía cómo pelear con ellos me sentía asustada, no sabía qué hacer ni cómo defenderme busqué con la mirada a los lobos de esta manada queriendo saber si estaban vivos o habían muerto intentando defender a la manada.Me sorprendió la rapidez con la que los vampiros se movían, a lo mejor ví a wilfrán atacando a max, corrí hacia él y me transforme en loba, me sentí más pesada y me di cuenta que mi barriga como loba se notaba más y se sentían más mis bebés.Una parte de mí me decía que tenia que correr hacia adentro y esconderme por el bienestar de mis bebés, estaba consciente que era peligroso ¿Pero que se supone que haría? Dejar a todos aquí defendi
Laila Carter — Sra Carter está bien?— Preguntó mi secretaria cuando me detuve en el ascensor.Me sentía tan mal, pero hoy no podía faltarAsentí con la cabeza.No estaba bien pero no tenía de otra tenía que estar bien.Trata de fingir una sonrisa — ¿Todo está listo para la reunión de hoy Mariana?— Le pregunté, ella aún con su rostro preocupado asintió con la cabeza. Todos en este lugar sabían la importancia que tenía el día de hoy. Caminé con mucho cuidado hacia mi oficina, una vez que entré tomé asiento, sentía que en cualquier momento mi vomitaria, la puerta de mi oficina se abrió y Mariana entró con un vaso en sus manos de verdad que sentía que esta mujer leía mi mente. Lo tomé.— el señor Jones la espera en la sala de juntas— respire profundo tomé otro trago del vaso que Mariana me había traído y luego me levanté ya me sentía un poco mejor las ganas de vomitar se habían ido. Sabía que tenía que ir al médico. Respira profundo un par de veces. — Mariana por favor encárgate
Laila Carter Desperté y lo primero que ví fue un techo blanco ¿Dónde se supone que estaba? Miré a un lado y pude ver unas máquinas y fue ahí donde escuché un sonido rápidamente lo reconocí era aquella máquina que mostraba los latidos en mi corazón miró un poco más allá y pude ver al Señor Jones acostado en el sofá aún cargaba el traje con el que había ido a la reunión. La reunión, la doctora, inseminación y el bebé Es como si todo hubiese llegado a mi mente rápido ahogándome y haciéndome recordar en el problema en el que ahora estaba metida. Llevé mis manos hacia mi vientre no sabía si aquí realmente había un ser vivo, pero el simple hecho de imaginarlo me aterraba. Había tenido una pésima madre aún cuando actualmente me estaba encargando de su salud había sido lo peor que me había pasado en la vida y tenía pánico de llegar a repetir sus errores. Claro que tampoco quería deshacerme de este bebé él no tenía la culpa de lo que había sucedido ¿Yo realmente sería cap
Maximiliano Jones La miré fijamente saboreando aquella desnudes. Que mujer tan hermosa, solo deseaba que mis cachorros sacaran aquella belleza. No podía creer que esa mujer era para mí, que era la mujer que la Diosa había destinado para mí. Vi como Laila cerraba la ventana una vez que me escondi. ¿De verdad ella no sabía quién era yo? ¿Porque se veía tan confundida cada vez que le decía Omega? Era claro su rango era claro el débil poder que viene ella pero aún así había sangre del lobo corriendo por sus venas. ¡¿Había una posibilidad de que ella no supiera que realmente era una loba?! ¿Cómo sería eso posible?! Nunca tuvo su transformación o solo quiere hacerse la humana frente a mí?! No tiene sentido, ella debe saber que persivo su olor, lo percibi apenas entró por la puerta de aquella sala de juntas. — Alpha!— Me giré y ahí estaba Luca mi beta mirándome — ¿Que desea hacer? Esa era una buena pregunta Volví hacer humano, mi beta me paso mi ropa rápidamente me la coloqué