CONTRATO; INFIERNO TENTADOR
CAPÍTULO 84; Descontrol I
—CLAUDIA—
—¡Amo aquí!
Le digo en el oído a Patricia en voz alta. La música está demasiado alta. Hemos venido a una discoteca, pero siento que es la discoteca más extraña a la que he ido, por alguna extraña razón los muebles son en figuras de animales salvajes y la decoración es muy parecida. Las luces en vez de ser en distintos colores como lo típico de las discotecas son negras con blancas y le dan un ambiente espectacular al lugar.
Los chicos han venido, entre esos Harrison que no esperaba que se viniera a Cancún, se supone que debería de estar trabajando, aunque me encanta tenerlo aquí.
Cambian la canción por un reggaetón y me levanto a bailar, lo que menos me importa son las miradas de todos sobre mí. Me dejo llevar de la música y cierro mis ojos, bajo mis manos por mi cuerpo mientras bailo y cuando abro los ojos tengo de frente a Harrison, sonrío cerca de sus labios y me agarra de la cara para darme un beso. Sus labios se