C153-EL ÚLTIMO LATIDO.
C153-EL ÚLTIMO LATIDO.
Reginald Langley yacía en su cama; el cuarto privado del hospital estaba en penumbra, con el sonido constante del monitor cardiaco llenando el silencio. Sus párpados se abrieron con lentitud cuando escuchó la puerta abrirse.
Una mujer entró con paso tranquilo, llevando el uniforme impecable y una sonrisa que no transmitía calidez.
—¿Dónde está Helen? —preguntó Reginald, refiriéndose a su enfermera habitual.
—Está de permiso —respondió ella, cerrando la puerta sin prisa—. Yo seré quien cuide de usted… por última vez.
Reginald frunció el ceño, intentando incorporarse.
—¿Por última vez?
—Así es. —La mujer se acercó y, con una suavidad calculada, le acarició el cabello blanco. —El señor Maxwell no es de los que olvidan las cuentas pendientes… y hoy, se cobra una muy importante.
El cuerpo de Reginald se tensó y los pitidos del monitor comenzaron a acelerarse.
—¿Qué…? ¿Quién es usted? ¡¿Para qué la envió Grayson?!
Ella no respondió de inmediato; en cambio, caminó ha