Capítulo final: El amor que perduró a pesar de todo.
POV Carolina
El eco de las risas de los niños se había convertido en mi melodía favorito.
Corrían por el jardín de la mansión como pequeñas ráfagas de energía, aunque aún no lograban caminar perfectamente. Isabela se acercaba tambaleándose hacia el globo más cercano, con sus pequeños brazos levantados, mientras Valentina emocionada gritaba por el pastel. Sofía, siempre más serena, observaba con esos ojos curiosos que me recordaban a su padre.
Era el día de su primer cumpleaños.
Hacía un año que las había visto por primera vez. Un año desde que mi vida encontró un propósito que jamás creí que podría tener.
Elías estaba a mi lado, vestido de manera casual, lo cual era inusual en él, con una corona de papel que una de las pequeñas le había colocado. Reía, relajado y feliz, como nunca antes lo había visto. Finalmente, parecía que, tras tantas dificultades, el sol había decidido brillar para nosotros.
—¿Recuerdas cuando creías que no serías una buena madre? —me susurró al oído.
—Y tú creía