Ayla, jamás olvidó a ese hombre lobo. Nunca mencionó lo que Bledd era. Pero pasaron los años y él no regresó.
Cada día de su vida lo recordaba con mucha nostalgia. Él la dejó por miedo a que la mataran, luego de aquel incendio se fue junto con su manada.
Solamente quedaron en su memoria los bellos recuerdos, y en su piel quedaron grabadas las caricias, y el dulce sabor de sus besos.
Su vida dió un giro inesperado. Nikita nunca se rindió y ella aceptó aquel amor, un sentimiento que no era mutuo. Vivía una mentira, encadenada a una vida que no le correspondía.
Nikita, no compro aquellas tierras al final. Solo quería alejar a Bleddyn de su amada y se salió con la suya. Se casó con Ayla, aun sabiendo que ella no lo amaba. Sabía interiormente que su corazón pertenecía a alguien más.
Aun así, era un esposo bondadoso y era capaz de dar su vida por Ayla.
Ayla aceptó casarse con Nikita, pero fue más para complacer a sus padres.
Ella aprendió a quererlo, pero le dolía en el alma al saber qu