Habían ciertas cosas en la vida en las cuales uno tiende a olvidarlas, no confundirlas yo era consciente de las cosas que hacía pues yo ya no era una niña sino una mujer hecha y derecha, pero lo que me enojaba tanto era sentirme impotente de alguna situación en la que me encontraba y justamente eso era lo que estaba pasando en este mismo instante y me refiero al beso de James, no sé porque carajos siempre que este chico hacía algo atrevido yo justamente tenía que acceder, era algo como que iba en contra de mis principios, ni siquiera yo me lo podía entender.

Habían algo en los besos de él no sé qué era lo que pasaba conmigo pero siempre que él se acercaba a mí de esa forma y me besaba podía sentir que todo mi cuerpo se detenía y no respondía a las acciones que yo le demandaba desde mi cerebro, quizás sonaría un poco extremo pero la verdad es que no podía hacer absolutamente nada cuando este chico me tomaba la fuerza, me sentía como si él tenía potestad sobre mi cuerpo, sobre mis pens