ARIEL
El dolor que me invade el pecho no se compara con lo que viví antes, la mujer que permanece frente a mí, lastimando a Vaitiare, marcando su rostro, no hace más que acrecentar las ganas que tengo por matarla, me ha golpeado la cabeza en cuanto intenté salvar a mi hija, me ha amarrado y aunque no me ha hecho nada porque estoy embarazada de Preppy, me da asco el simple verla.
—El mundo de la mafia es cruel, sabes —dice y trago grueso.