El domingo pasa demasiado rápido y por desgracia es lunes. Me paro de la cama con ganas de matar a alguien y poder dormir mil años. Me meto en la ducha para poder despertarme completamente. Hago mi rutina y salgo del apartamento con tiempo, raro, pero cierto. Camino sin prisa hasta llegar al ajetreado campus. Voy directamente a mi primera clase sin encontrarme con Lilian.
***
Suena la campana dando por finalizadas las clases de hoy, menos mal. Voy directa a la cafetería.
-Hola- saludo a Martha, hay un par de clientes y hoy aún no he visto a Lilian, raro.
- Hola bonita- me responde sonriente desde detrás de la barra- podemos hablar un segundo?- pregunta y yo asiento un poco extrañada, sal