CAPITULO 34 EL FIN

ZAYED

El sabor metálico en mi boca me revuelve el estómago, la herida en mi pecho no deja de sangrar y apenas consigo mantenerme despierto. La imagen de Clara tirada en el pavimento, como un cadáver, tiene mi corazón en agonía. No sé qué sucedió con ella y mi hijo. Mi alma está destrozada y me es difícil mantener la compostura. Necesito verla, saber que están bien, estar con ella. Necesita de mí. No sé cómo, pero tengo que encontrarla, a ella y a mi bebé. No puedo dejarlos atrás.

Estoy atado a una viga en el techo. Mi cuerpo no responde, pero sigo despierto. A mi lado, otro hombre, un socio de Dubái, se encuentra en la misma situación. Reconozco su rostro demacrado, y aunque está apenas consciente, lo sé: al igual que yo, está a punto de morir. La sangre cubre mi piel, empapando mi ropa y el suelo bajo mis pies. Intento liberarme con lo poco que me queda de fuerzas, pero mis manos no obedecen. La pérdida de sangre es tan grande que mi vista se nubla constantemente. La desesperación me
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App