Ante su repentino actuar, todo mundo guardó silencio y fijó su mirada en Elizabeth.

Elizabeth Benedetti, una joven loba conocida por ser orgullosa y vanidosa, se estaba disculpando frente a dos manadas y un grupo de cazadores.

―Lamento haberte expuesto de esa manera ―agregó sin enderezarse

Al ver su comportamiento, lobas y lobos comenzaron a cuchichear mientras que otros posaban su mirada en Anna, cuyas mejillas, ahora estaban mucho más rojas que las de Elizabeth.

―E-Está bien, Eli… ―balbuceó una avergonzada Anna ―Tranquila… ―

―Diosa… Ya siéntate ―gruñó Egan tirando de su brazo para forzarla a sentarse

―Y nuestra estrellita que no quería ser el centro de atención esta noche ―rió Gael

―Habíamos quedado en disculparnos en privado ―murmuró Adeline, quien se encontraba sentada en la mesa de al lado ― ¿Debería imitarla?

―Tranquila, Anna aceptará tus disculpas, aunque sean privadas ―la tranquilizó Gael con un tono suave y despreocupado ― Con esto, nuestra Eli sólo quiere demostrar que ha ap