CAPÍTULO 11: OFERTA.
Hayami llegó a la oficina muy puntual como todas las mañanas. Ariel la miró con descontento, pero a pesar de eso, Hayami la saludó educadamente. Después de recibir el "buenos días" de mala gana de Ariel, se acercó a Angélica, que ya estaba en su puesto.

—Buenos días, licenciada.

Dijo Angélica mientras se arreglaba un mechón de cabello.

—Buenos días, "Angie". ¿Hay algo pendiente para mí?

No, Lic.

—Ok, entonces hazme dos favorsitos: el primero, ¿podrías conseguirme un café con leche de la cafetería? Y el otro es que, ¿sí me puedes comunicar con mi contador?

—Sí, Lic. Ahora voy por su café y, en cuanto regrese, lo pongo en contacto con su contador.

—Gracias, eres muy linda.

Hayami sonrió; Angélica también lo hizo, un poco ruborizada. Su jefa cada mañana le sonreía; estaba muy contenta de trabajar con ella.

Hayami entró a su oficina, vio a través de su ventana mirando el cielo un poco nublado, y pensó que ese día no era el mejor que había visto desde que había llegado de Canadá. Angélica p
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP