—¿Qué, qué dijiste?
Desde atrás, llegó la pregunta sorprendida del hombre, como si no hubiera escuchado claramente las palabras que Juliana murmuró. Sin embargo, esa pregunta también llevaba consigo cierto cuidado.
Juliana mantuvo su postura sin cambios. Estaba de espaldas al hombre, su voz apagada