Diana se acercó un poco más.
—Escuché que el Grupo Lawson perdió recientemente el 51% de sus acciones. La empresa estaba en caos hasta que Blake apareció y la salvó.
—¿De verdad? ¿Dónde escuchaste eso? ¿Estás segura de que es cierto? —preguntó Bianca, frunciendo el ceño.
Diana asintió.
—Brandon me lo dijo. Tiene algunos contactos dentro. Dijo que Triumph Capital ahora controla el 51% de las acciones del Grupo Lawson. Los tíos de Blake, que antes eran accionistas independientes, le cedieron sus acciones.
—Así que… sí es hijo de Brady —dijo Bianca en voz baja, aún tratando de asimilarlo.
Diana cruzó los brazos y soltó un suspiro.
—Sí. Aunque lleva el apellido Lawson, nunca esperé esto. Y él… siendo un hijo ilegítimo… Es impactante lo rápido que consiguió el apoyo de la familia.
Lo que Bianca y Diana no sabían era que Blake ya no era el mismo de antes. Había cambiado. Ahora era frío y despiadado, escondiendo su verdadero ser detrás de una sonrisa educada.
—Pero… —Bianca quiso decir al