La palabra "amigos" de Bianca encendió la ira de Blake. No quería ser solo su amigo; se negaba a aceptar eso.
Antes, respetaba sus decisiones, pensando que podía dar un paso atrás y desearle lo mejor, ofreciéndole consuelo cuando lo necesitaba como amigo.
Pero ahora se dio cuenta de que estaba completamente equivocado. No podía quedarse solo viéndola lastimarse.
Él debía ser el que la hiciera feliz.
Si Bianca se quedaba con él, la protegería de cualquier dolor. Quería priorizar su felicidad el resto de su vida, haciéndola la mujer más feliz del mundo.
Esta vez no era por él, sino por ella. Nunca volvería a rendirse con ella.
Blake frunció el ceño, agarró la muñeca de Bianca y la atrajo hacia él. Se inclinó y presionó sus labios contra los de ella en un beso suave pero apasionado.
Justo en ese momento, Dave apareció por la esquina fuera de la tienda. Ya había hecho que Skylar se fuera y se dirigía a explicarle todo a Bianca. Pero al acercarse, vio a Blake inclinándose para besar