112. CONFLICTO DE APELLIDOS Y HONOR
—¿Acaso has perdido el juicio, Iván Felipe? —Rebeca sujeta con manos temblorosas el documento que acabo de entregarle. Su expresión es una mezcla de horror e incredulidad.
—Claro que no. —Mi voz es firme, inquebrantable—. El apellido Ortega fue obtenido mediante chantaje. Sabiendo eso, jamás aceptaré a ese hombre como mi hermano. Alguien como él no merece llevarlo.
Mi padre no fue un buen hombre, ahora lo sé, pero el apellido Ortega no le pertenece solo a él. Mi madre ha trabajado incansablemente para mantenerlo en alto, y yo he hecho lo mismo.
Los ojos de Rebeca recorren la habitación, asegurándose de que nadie más pueda escuchar lo que está a punto de decir.
—Por favor, reconsidéralo. Lo que pasó entre ellos fue antes de que ustedes se casaran. Si presentas esta denuncia, no solo le quitarán el apellido a Pablo… También estarás gritando al mundo que entre mi hermana y mi esposo hubo un amorío. ¿Estás dispuesto a enfrentar lo que eso implicará socialmente?
Sonrío con ironía. ¿Cómo es