019. INTRUSO EN LA CASA
AMALIA
Nunca me había quedado dormida tan relajada y profundo.
Mi vida de supervivencia no me lo permitía, sin embargo, vine a reaccionar cuando sentí que Ajax me acomodaba en una cama.
— Tranquila nena, estás casa de Elsa, hubiese querido pasar la noche juntos, pero surgieron algunos asuntos urgentes – me explica y asiento, media dormida.
Un suave beso cae en mis labios y veo su enorme espalda alejarse en la oscuridad de la habitación y salir por la puerta.
Mis pensamientos se apagan al caer nuevamente en el sueño profundo.
Al otro día, todo fue tranquilo como siempre, ayudé a Elsa a organizar la consulta que realmente nadie utilizaba.
Me pasé todo el día mirando por la ventana, esperando verlo aparecer en cualquier instante, sin embargo, nunca llegó.
— El alcalde está muy ocupado, él es algo así como el responsable que muchos pequeños pueblos que dependen de las minas – me explicó Elsa sacándome los colores, es obvio que me descubrió.
— Ah, claro, debe ser un hombre muy ocupado – su