¡¡Maldita sea, estoy a punto de explotar!!. Me sentía en la gloria, jamás en mi vida había tenido dos orgasmos al mismo tiempo. "¡¡Mierda, en verdad que este hombre se tiene ganado el título de Demonio!!". —Sebastián.. —siento que el aire intenta escaparse por mi boca cuando su lengua penetra mi coño. —¡¡dios!!.. —Sujeto su cabeza para que la introduzca aún más pero las sujeta impidiendo que lo haga. —Ven acá. Se me dificulta la respiración. "Y Como no, si te ha dado más de lo que deseabas". ¡¡maldición sí, y aún quiero más!!. Siento sus manos tomarme a horcajadas mientras devora mis labios con gran necesidad. ¡¡Este hombre me volverá adicta al sexo!!. "¿Más de lo que ya eres?". Bueno, solo un poco, pero Sebastián me dice: aún lado. Ocupando el primer lugar. Estaba tan concentrada en este fogoso y letal beso que ni siquiera me di cuenta en que momento el había caminado hasta adentro del departamento. Al sentir la suavidad de la cama mientras soy lanzada comprendo que, ¡al fin había lle
—¡¡Sii!!, ¡¡Joder, lo conseguí!!. La emoción por gritarlo a los cuartos vientos, es más enorme que guardar el secreto, me lanzo sobre mi cama tan feliz que había olvidado que hoy tenía trabajo porque aun era viernes, pero por el día de hoy, me daré el lujo de llegare tarde, ¡¡gracias dios!!, mi sonrisa no desaparece desde que salí de su departamento, en verdad que anoche fue una la mejor de mi vida. —hay querido Sebastián —sin evitarlo me carcajeo al recordar su cara agria cuando le dije que el estúpido de Alan es mejor que él. —Eso te pasa por simplón e idiota. Su voz excitada aún sigue en mi cabeza mientras me decía ninfa entre jadeos y gemidos. ¡joder!. Esa mirada tan penetrante de esos hermosos ojos azules me fascinan tanto y más al ver la lujuria reflejada en ellos. Con solo recordar lo que pasó anoche, mi cuerpo ardió nuevamente. Cada caricia suya está en mi piel tan viva como su hubiese sido hace un minuto y su aroma, ¡mierda!, sentir su aroma en mi piel me vuelve loca. —¡¡Mari
Capítulo 111081 palabras Última actualización:2024-03-11 14:59:52 Solo encuentro una palabra para describir a esa mujer. Fuego. Si, ella tan candente, sensual y.. ¡Joder!. Es insaciable y eso descoloca pero a la vez me encanta. Su voz, sus gemidos mientras me pedía más solo me volvían loco y es algo que jamás me había pasado, no dejo de pensar en ella, su imagen ocupa toda mi mente que jamás lograba despejar desde esa noche. Joder, se veía, tan elegante, tan hermosa como una ninfa, pero jamás me imaginé que fuera tan agresiva como una fiera, pero eso no me impediría mi objetivo, acostarme con ella pero ahora que lo he conseguido, no quiero solo una probada porque eso fue para mí y ahora deseo tener su cuerpo tan ardiente hacer fricción contra el mío, sentir de nuevo esos labios tan carnosos y apetecibles sobre los míos, y esa mirada, esa mirada que me dice que caer en sus brazos sería mi perdición. Podría decir que ella es una versión de mi solo que es una mujer. "Una mujer fabulo
Capítulo 121077 palabras Última actualización:2024-03-11 14:59:52—A mi oficina. —dije sin detener mis pasos pero al no escuchar su taconeo me detengo para verla. Aún seguía sentada y eso me extrañó —Lo siento pero no. —dice con simpleza observando sus uñas. ¡¿Acaso es un chiste?!. —Usted trabaja para mí —la paciencia se acaba en mi —Así que obedezca. —Si es cuestión de trabajo iré, de lo contrario seguiré con mi trabajo pendiente. Así que me está provocando, bien entonces será por las malas. —De acuerdo —le doy la espalda pero vuelvo a verla sobre mi hombro. —Por cierto, quítese esa bufanda que no combina con su atuendo. La sorpresa en su rostro se hace presente así que sigo caminando al lograr mi primer objetivo y después vendría el siguiente. Ya era hora de almorzar así que le marcó al teléfono de su escritorio antes de que se fuera. —Presidencia Lombardy. "Que voz más sexy". Incluso en el teléfono su voz es tan ardiente como su cuerpo. —Hola ninfa. —apoyo mi espalda al respalda
Capítulo 131446 palabras Última actualización:2024-03-11 14:59:52 Adicción, es lo que es Sebastián para mi, mi cuerpo exigía a gritos ser tocado por esas manos que producen tanto fuego en mi cuerpo al punto de hacerme perder la maldita cordura. No podía resistirme a tanto placer y más si viene de mi sensual jefe. —¡Mierda!, mi casa está lejos. —golpea cabreado el volante. —¿Entonces porque no vamos a mi casa?. ¡¿Que cosa dije?!. ¡No!. Definitivamente a mi casa es el peor lugar al que podríamos ir, y ya se imaginan porque lo digo. Pero no, yo estúpidamente tengo que sugerirle mi casa. —¿Estas segura que tendremos la privacidad ahí?. —su pregunta fue como un ronroneo para mi. —¿Estas segura Marcela?. — cruzo de brazos porque todavía le da vueltas al asunto —¿Quieres o no quieres?. Al verlo sonreír por mi tono desesperado ¡Dios!, humedece mi coño por lo sensual que hace esa maldita sonrisa. Le di mi dirección y en menos de media hora estábamos frente a mi casa y lo primero que veo es
Capítulo 141097 palabras Última actualización:2024-03-11 14:59:52No, no, no, esto no es lo que tenía mente, y ahora, ¡¿Que carajos hago para sacarlo de mi casa?!. El parece divertirse al verme cabreada y eso solo me enfurece más porque no soy la burla de nadie, eso jamás. Me quedo observándolo desde la entrada de mi habitación, Sebastián se pasea por toda la habitación sin borrar ese maldita sonrisa que me pone nerviosa. "Pues claro estúpida, si este bombón te mueve el tapete". Movérmelo se queda corto y demasiado diría yo. ¡Mierda!, ver ese espectacular cuerpo, ¡dios!, esos músculos que me estrujan cuando me tiene debajo de su de él mientras gruñe como una bestia mientras que .. “ ¡No estúpida, deja de pensar en tantos morbos con tu jefe!”. ¡¡Al diablo, me lo quiero coger y no quiero verme como una fácil!!. Carraspeo mi garganta al sentirla seca por culpa de mi morbosa imaginación. —¿A que hora te irás de mi casa?. Intento verme tranquila pero, ¡mierdas no puedo, joder, aun no me
Capítulo 151431 palabras Última actualización:2024-03-18 00:38:36—¡¡Pues... si no lo sabías.. ahora la sabes!!. La rabia era la única que estaba presente pero esta empeora al ver a la perra de Marta con una lencería demasiado reveladora. Pero eso no es lo que me deja estupefacta, sin creerlo abro grandemente mis ojos al ver que su embarazo era una total farsa, ¿por qué lo digo?. ¡¡Porque estoy viendo su maldito vientre plano cuando hace no mucho se lo había visto abultado!!. Dejo a mi querido ex, tendido en el suelo convulsionando, y no de un orgasmo. Mi maldad se enciende al cien como si fuera una psicópata a punto de asesinar a su presa. Al verme entrar ella retrocede. —¡Sal de mi casa o si no.. —¿Que? —me burlo al verla tenerme miedo. —¿Acaso vas a llamar a tus "Oficiales?. —N-No.. se de que hablas.. —¡¡Ya deja de hacerte la mosquita muerta!!. —grité cabreada. —¡A este imbécil jamás se le ocurrirá una broma que pudo dejarme sin empleo!. —sus ojos observan el taser que cargo con
Ha sido un camino difícil para mí, pues, desde el día en que me casé con mi ex esposo Alan, creí que todo sería perfecto al creer que el era el indicado. Siempre soñé con encontrar al hombre perfecto, el hombre que me llevaría al altar y me juraría amor hasta la muerte pero, me di cuenta que nada es para siempre y que todos los hombres son iguales.Los primeros meses fue perfecto o eso creía yo, él era amoroso conmigo y detallista, me regalaba flores y todos los viernes me llevaba a cenar o íbamos al cine y luego terminábamos la noche con sexo o para mi hacer el amor. Pero todo eso cambió, el se volvió tan distante y frío conmigo, incluso hasta en la cama y ya estaba cansada de que todos los días sean lo mismo.La gota que rebalsó mi tolerancia fue cuando lo encontré en casa de mi vecina desnudo con su pene erecto dentro de su asquerosa vagina. ¡Ja!, y lo peor es que el muy cínico y sinvergüenza me dijo: "Mari, no es lo que piensas". ¡Como que no es lo que pienso!", ¡si tiene su verg