EmilyLos guardaespaldas de Ethan me han dejado fuera de su habitación por horas.Después de que despertó y me vio… me sacaron directamente de la habitación como si fuera a hacerle daño, no lo sé.La forma de actuar de los guardaespaldas fue totalmente extraña. Un parpadeo de Ethan y fui arrastrada hasta el pasillo, incluso Jim fue golpeado cuando trató de defenderme.No podía entender cómo los hombres que me habían salvado de la tortura de Dominique, que me cuidaron durante mi estadía en el hospital, ahora me trataban de esta manera.Pero lo más doloroso era esa mirada de Ethan.Amor, decepción, ira y luego, simplemente indiferencia. Todo acumulado en el mismo instante. Después, ese parpadeo que me tiene separada de él.—¿Qué pasó con él? — susurro con preocupación, a pesar del enojo y es que tampoco puedo quitarme la imagen de Ethan sufriendo, sus gritos de dolor, el sudor en su frente… parecía que sufría de lo mismo que yo: un ataque de pánico o algo más intenso.Tan intenso que te

Jim—¿Eres mi hijo? — pregunta mi madre con los dientes apretados por el enojo. A pesar de que sonríe para que nadie más se dé cuenta de que está tan enfadada. Bueno, siempre ha logrado guardar las apariencias. Desde que se casó con mi padre biológico, pude darme cuenta de que cambió, que dejó de ser ella misma y que comenzó a guardarse todo.Podía disfrutar de las grandes fiestas, a pesar de que por dentro estaba tan enojada o triste. Como en las reuniones de élite que coincidían con el aniversario luctuoso de mi padre. La mirada de mi madre estaba llena de tristeza, mientras sonreía ampliamente a las otras esposas, o las cámaras cuando le tomaban fotos junto a Phillip.—Sabes que sí, mamá. Soy tu hijo. Pero también sabes que esto es lo correcto— respondo con calma.—¿Lo correcto, Jim? —Su voz tiembla por la indignación. —Perdimos todo… perdimos a tu padre y a tu hermana por culpa de la fortuna Branson y ahora, tú quieres dejar que te la quiten sin más…Puedo ver que está más alterada

EmilyEthan me gira para que enfrente al público, aun sosteniendo mi cintura con fuerza, como dándome a entender que no me soltará, que no me dejará caer. Por dentro, entre el mar de emociones, siento un poco más de tranquilidad de sentirlo a mi lado. Es como si supiera que estaba sufriendo y decidió ayudarme, protegerme.Mi corazón es un estúpido que, con un simple abrazo, vuelve a enamorarse.Respiro hondo varias veces, hasta que, con su apoyo, vuelvo a colocarme derecha, lista para enfrentar los juicios de todas las personas abajo. Estoy lista para enfrentar lo que venga, y a proteger mi pasado.Porque… por más que Phillip y Jim hagan público que me aceptan como parte de su familia, sigo siendo una hija ilegítima a los ojos de todos y ese estigma, en este mundo, es peligroso y cruel.Levanto mi mirada y observo a cada persona que está entre el público, asegurándome de verlos directamente a los ojos, afirmando con ese pequeño gesto, que aquí estoy, que no me doblegaré ante ellos, po

Emily—¿Quién eres? — le pregunto con firmeza, tragándome la molestia y mis ganas de desordenar su melena rubia.La mujer vuelve a mirarme con burla.—No tienes derecho a saberlo— dice con arrogancia.Aprieto mis manos en puños, harta de ella.—Y tú no tienes derecho a estar aquí. Este espacio está reservado solo para la familia Branson…—¿Familia? ¿Crees que eres parte de esta familia? — Comienza a reírse mientras camina a la salida del baño. —Es una lástima, solo eres un peón para todos— Me da una mirada de lástima y una sonrisa de burla, y se va.—Pero qué carajo acaba de pasar— digo enojada. ¿Quién es ella? ¿Cómo demonios llegó hasta aquí?Cierro los ojos con fuerza.Ya tengo demasiado en mente y todo un revoltijo emocional, como para todavía llenarme la cabeza con las tonterías de esta mujer.Además, ya lo sabía. Esto iba a pasar. Incluso Jim, también me dijo que cualquier persona se acercaría a mí con segundas intenciones después de que se supiera mi identidad y, por más prepara

Emily—¡Ethan! — grito su nombre cuando sus caderas chocan contra las mías, ingresando en mí sin previo aviso. El dolor y el placer se funden en uno solo, incluso puedo admitir que acabo de llegar al clímax en este mismo instante.—¡Dios, cariño! Sigues tan apretada para mí, tan lista y caliente— gruñe contra mi cuello, mordiéndolo también. —No puedo resistirme a ti. Lo intenté, pero no puedo…— dice entre gruñidos.No puedo pensar más en lo que dice porque sus caderas vuelven a golpear contra mí y su mano también impacta en mi trasero. Nunca en mi vida había sentido esto, jamás me había interesado esa mezcla de fuerza, pasión y dolor. Nunca ni en mis mejores sueños húmedos.Pero Ethan me está llevando a la locura, a sentir cosas y a desear tantas más.Su mano impacta de nuevo y mi gemido de placer hace que Ethan se vuelva más rudo.—Eso es, cariño. Disfrútalo, disfruta todo lo que te doy. Disfruta de nuestro momento— su mano rodea con fuerza mi cintura. —Sostente bien, mi amor.Ese mi