Margot El paseo en bote fue increíble. De hecho todo el recorrido ha sido igual. Jayden me llevó, luego del puente de los suspiros, a recorrer el centro de la ciudad, nos hemos tomado al menos media docena de fotos y no puedo negar que me he divertido como nunca, en especial cuando me llevó a ver el Museo FitzWilliam y no pude quedarme más enamorada del lugar porque sería imposible, nada más entrar fue como ser trasladada a otra época. La especialidad del museo es el arte y las antigüedades y, según lo que Jayden me contó mientras hacía de guía ignorando totalmente a los verdaderos guías, su nombre se debe al vizconde Fitzwilliam of Merrion, otro de la nobleza, quién lo diría, quien en 1816 donó a la Universidad su colección de arte, su biblioteca así como dinero para construir la sede del museo en la cual estábamos.Debo admitir que no he ido a muchos museos en mi vida, si conozco unos tres o cuatro es mucho y hasta ahora no me había dado cuenta de todo lo que me estaba perdiendo,

Jayden BowenEstoy enojado. Joder, no, estoy despúes de lo que viene de estar enojado y ni siquiera tengo derecho real a estarlo y mientras intento tragar el desayuno no puedo evitar mirar de reojo a la sexy pelirroja enfrente mio hacerme la ley del hielo. No he podido ser más imbécil, pero es que mi rabia a pesar de saber que he sido hostil, no baja. En especial al ver que a ella ni siquiera le importó saber más allá de lo que yo le acabo de decir. No preguntó, no cuestionó. No le importó.Ayer, cuando nuestra salida, la cuál fue de maravilla, estaba llegando al punto final, no tuve ningún problema con hablarle claro a Margot. Me gusta, me excita, me calienta y creo que a estás alturas eso no es un secreto para ninguno. Así como tampoco lo es que ambos estamos esperando algo del otro, por eso luego de haberle dado vueltas toda la tarde, había llegado a la conclusión de que, si ya íbamos a estar fingiendo ser novios, ¿qué problema podía haber en dejarnos llevar por la atracción? al

Jayden BowenLos labios de Margot tocan los míos como en una reverencia, se siente casi como si estuvieran pidiendo permiso para hacerlo. Y me deleito al sentirlos tibios, cálidos, perfectos; y de inmediato estoy hambriento. Joder, es que desde la primera vez que la bese en ese baño es como haber descubierto una adicción de la que no tenía idea y de la que no me quiero olvidar. Por lo que no demoro en profundizar el beso.Mis manos se afianzan a su cintura y la atraigo por completo hacia mi. No paso por alto el suspiro que sale de ella, ni tampoco el pequeño jadeo que dejó salir cuando mi lengua recorrió su labio inferior en una petición silenciosa a la que ella responde abriendo más su boca para mi. Cuando mi lengua toca la suya siento como si miles de fuegos artificiales se hubiesen encendido en mi interior y cuando ella mordisquea mi labio con fuerza y de inmediato vuelve a lamerlo y besarme con fiereza, en ese momento siento como los pantalones empiezan a sentirse apretados en mi

MargotLos labios de Jayden se abren para recibir los míos sin protesta, ni juegos. El beso es hambriento, necesitado, urgente y parece tocar cada una de mis terminaciones nerviosas, porque mi cuerpo empieza a temblar y siento que no tengo suficiente, nada parece ser suficiente, así que me aprieto más a él y ahora lo siento todo contra mi. Cada punto, cada relieve y toda su dureza conectando conmigo.Sus manos son como brasas de fuego, queman en cada maldito lugar que me tocan: bajan por mis omoplatos, se acunan en mi cintura con fuerza, rozan mis caderas y aprietan mi culo de tal forma que un gemido alto y ruidoso escapa de mis labios al mismo tiempo que Jayden gruñe y me alza por los muslos, de inmediato tengo mis piernas rodeando su cintura y me deleito sintiendo como su miembro, duro como piedra, se aprieta contra mi pobre vagina que está hirviendo.Cuando creo que va a llevarnos a la cama, me sorprende darme cuenta que soy dejada con cuidado sobre el escritorio que está detrás de

Margot SkySanto padre amado, el sexo con Jayden ha sido alucinante. Aún me cuesta creer que me atreví a lanzarme de la manera en que lo hice, pero es que Joder, ya no podía resistirme más, era como si el cuerpo me estuviera exigiendo ceder y yo tenía la necesidad de complacerlo, aún la tengo a decir verdad. Pero ya no tenemos tiempo para juegos, estos se habían acabado en el baño luego de que volviéramos a ceder ante la pasión. Ahora estaba terminando de arreglarme para la gala de noche que Susana daría en el salón principal de la mansión.Sinceramente prefiero quedarme encerrada en estas cuatro paredes y dejar que el sexy moreno me haga todas esas cosas ricas que sabe hacer, pero no debo olvidar que tengo un trato con él y que mi misión aquí es mostrarme como la novia más enamorada de todas y ayudarlo a quitarse de encima al ex polvo resentido y es por eso que me he metido al baño a cambiarme buscando algo de privacidad y también para calmar a mis arrebatadas hormonas.El vestido qu