Una vez que la pasión de Axel fue atendida y quedó satisfecho, se había quedado recargado en el asiento del coche recuperando el aliento. — Eres genial cariño, eso estuvo increíble. No sabía que eras tan bueno con esa traviesa lengua. Ya vámonos a tu vuelta, nos estamos demorando demasiado. — El CEO comentó de lo más normal. — Todavía tengo siete minutos de tiempo, vas, es tu turno, ¿Acaso me pensabas dejar así? — ¿Qué...? ¿De que hablas? No entiendo, ¿Qué vaya a dónde? Oliver se bajó el cierre del pantalón y sacó su duro miembro. — Te hablan aquí abajo, me tienes muy caliente, no voy a ir a ver a mis hombres con la verga dura, encárgate de dormir lo que has despertado. — ¿Cómo...? ¿Tú quieres que te dé... una mamada? — No te vaya a llevar la NASA por inteligente, por supuesto que sí, ven aquí y haz tu magia. — Oliver sin previo aviso atrajo los labios de Axel y los puso justo donde los quería. El CEO todavía no salía de su asombro cuando ya estaba siendo embestido po

El mafioso al ver a su mujercita con las mejillas sonrojadas y arrastrando las palabras lo supo de inmediato, ella estaba ebria. — Úrsula, ¿Por qué has bebido? Tú no deberías tomar alcohol, ¿Qué es lo que sucede contigo? ¿Tengo que estar cuidándote todo el tiempo para que no hagas estás cosas que te ponen en peligro a ti y al bebé? — No me grites, ¿Lo ves Emill? ¡Alessandro me está gritando, como estoy gorda ya no me quiere y ahora coquetea con otras mujeres. Pero no te voy a estorbar, puedes irte a seguir con tus coqueteos! El mafioso se puso una mano en la cintura, y la otra se la puso en la frente, su mujercita le acababa la paciencia. — No te estoy gritando, solo te estoy diciendo que no debes beber alcohol, Emill, ¿Por qué le diste alcohol a tu hermana? ¿Qué no te das cuenta de su estado? ¡Eres un imbécil, tu deberías ayudarme a cuidarla, pero en cambio la alcholizas a ella y al bebé! — ¿Al bebé también? — ¡Pues claro, todo lo que ella come o bebe también llega a

Oliver se quedó pensando, sabía que terminaría agotado y no quería que Axel lo desvelara de nuevo cuando terminara la guardia. — Está bien, pero no olvides que solo será una cena, necesito descansar o no podré rendir en el trabajo. — Te doy mi palabra. Debes confiar más en mi, no solamente quiero tu cuerpo, también quiero que pasemos tiempo juntos Oliver. — Hmmm... Bien, me gustaría cenar un rico filete con verduras salteadas, un buen vino y una grata conversación. — Lo tendrás, ahora vamos que quiero saludar al señor Rodríguez y a sus hijos, hay algo que quiero hablar sobre todo con Emill. — Mucho cuidado en fijarte en alguien más, Black, como ya te diste cuenta no soy alguien con quien puedas jugar. — ¿Qué? Pero a Valencia no lo mataste, y él estaba jugando contigo. — Es diferente. No éramos nada, no salíamos, además es atractivo y todo pero no tengo sentimientos por él. — Hmmm... ¿Con que atractivo, eh? entiendo, tienes sentimientos por mi y por eso no quieres qu

Parecía o más bien estaba sucediendo que la bella jovén Black estaba bateando al apuesto hombre de mirada verde felina. Pero él no se inmutó en lo absoluto. — ¿Qué crees que estás haciendo aquí con este tipo? — ¿No es obvio? Estoy en una cita, soy libre de tenerla, ¿O no soy libre? Janpierre es un buen hombre, quiero darme una oportunidad con él, creo que merezco amar y ser amada, acéptalo Emill. Márchate por favor. — ¿Estás diciendo que piensas que puedes sustituirme con este CEO ingles? Estoy seguro que no podrás sacarme de tu corazón para meterlo a él, tu me amas a mí, y no tienes por qué intentar amar a otro hombre si me tienes aquí contigo. — ¿Qué tengo? ¡Yo no tengo nada contigo, tú solamente vives para tu trabajo, seguro que tienes aventuras discretas y no te interesa tener una relación estable con nadie, no estamos en la misma sintonía, Emill! Ya deja ir el pasado. — Eso no va a suceder, no te voy a dejar ir Alessandra, serás mi esposa y madre de mis hijos, no hay

Alessandra estaba ante la imponencia del atractivo mafioso del que se había enamorado desde que era apenas una adolescente, pero él se alejó cuando comenzó su intensa preparación para suceder a su padre. El mafioso Deeguel Rodríguez era conocido por ser extremadamente estricto con su hijo mayor, ya que consideraba que si no lo preparaba como era debido, lo convertiría en blanco fácil de sus enemigos lo que resultaría en una muerte segura para el primogénito. — !Respóndeme! ¿Te gusta ese CEO más que yo? ¿Lo amas más que a mí? — !Nooo, Sabes que no, apenas estaba comenzando a tratar a Janpierre, pero te encargaste de que ese empresario no quiera saber más nada de mí después de lo que le hiciste hoy! ¿Qué es lo que quieres de mí, Emill? ¿Quieres que me quede soltera para siempre? Tú me quieres ver sola y sin un hombre a mi lado que me ame y me hagas feliz, ¿Cierto? Eres tan egoísta. — No lo soy, tienes que entenderme, no puedo verte con otro hombre, no puedo verte sonreírle a