Una mujer extravagante se pavoneo por fuera de la mansión de Malcolm, observaba hacia adentro esperando ver por suerte a la tonta de Lizzy, los guardias al observaron se miraron conspirando, ella tenía le cabello desalineado y un moretón en la pantorrilla, no era necesario investigadores para saber que esa mujer había golpeado a la chica de esa mañana. —¿Qué se le ofrece?—Nada, solo estaba observando la mansión es muy hermosa —tenía que entrar estaba convencida que estaba que estaba resguardada bajo el cuidado de Malcolm, si estúpida no es, admiro a los guardias no eran mal parecidos —Oigan chicos —se abrió el escote —, ¿no les apetece un poco de compañía?—Soy casado señora —dijo uno de ellos —Me gusta la carne fresca —respondió el otro Ninguno más de los veinte guardias que estaba cerca custodiando la puerta le prestó atención, era vulgar y lucia sucia, como drogada, desalineada —Malditos bastardos sé van arrepentir. —repelió sus burlas con un coqueteo, que no le salió bien,

Malcolm escuchaba la risa de Luci, y estaba seguro de haberla escuchando antes como un coro de querubines, incluso sentia tener un recuerdo de ella entre sus brazos y el sostenido una mamila, cambiando un pañal eran tan increíble jamás imagino que terminaría cayendo en los encantos de un bodoque de baba y llantos.—Así que tú eres la pequeña Luci,—ella balbuceo parecía que le respondía, coloco sus pequeñas manos sobre las mejillas de Malcolm, tan inocente quería que los ojos de él la miraran,— recuerdo tu rostro aunque ahora no pueda verte, siento que te extrañaba sin saberlo, Luci me alegra tenerte aquí junto a mí. ¿Por qué nadie me dijo que estaba en mi casa, por que nadie me dijo acerca de ella?—Tu no nos querías escuchar, aunque Luci no estaba en casa, justo hoy llego a pedir ayuda, su madre, su verdadera madre esta aterrada, la bebé está en peligro Malcolm—le comento Arianne, Malcolm sintió que la sangre se le helaban, intento protegerla colocando sus manos a su alrededor como u

Los periódicos y revistas estaban llenas de la bomba del momento, Tessa dio una nota exclusiva y exhaustiva con muchos detalles que conocía de la vida privada de Malcolm y Nicoll, la información que le convenia la envió a colegas para que todo Canadá se enterara.Al fin Nicoll estaba en la portada de las exclusivas revistas de espectáculos, en la secciones de sociales de los mejores periódicos y en las redes sociales siendo la comidilla y blanco de críticas. Tessa estaba en su oficina girando en su silla mirando el techo con una sonrisa, al fin se habia vengado. Y lo disfrutaba como jamás nada en su vida, amaría ver su cara.El desayuno fue servido en el jardín, la mañana estaba hermosa, Arianne veía todo lleno de luz y de esperanza, sentia una ilusión en su pecho segura de que todo de ahora en adelante iría muy bien.Las visitas no faltaban Malcolm escucho a voz de su hermano acercarse al jardín.,—Si, si vengo a ver al baquetón de mi hermano siempre fingiendo ser la víctima—conversa

Después de un par de terceros Arianne y Malcolm al fin se quedaron solos en el jardín, ella le agradecía con besos y abrazos efusivos su acto de bondad, ella jamás lo hubiera era imaginado en un papel altruista.Malcolm por fin disfrutaba de la dulzura a solas, estaba comenzando a arrepentirse de invitar a quedarse aquí a Lizzy con su hija, le estaba gustado la privacidad de un matrimonio de solo dos.—De todas formas que tal si amueblamos esa pequeña casa y tú y yo nos vamos vivir ahí un tiempo.—le sugirió entre besos—¡Un tiempo? —mordisqueo sus labio inferior —, ¿cuánto tiempo?—No sé, toda una vida. —cada beso era único, era el mismo hombre y los mismo labios, empezaba a conocerlos y calcarlos en su piel, pero por todos los cielos cada vez era como una primera vez, una sensación explosiva, un hombre al que no podía dejar de besar.—Te amo Malcolm, te amo profundamente—Yo te amo como un loco Arianne —Malcolm abrió los ojos y tuvo una imagen de Arianne entre nueves oscuras. Sonrió,

Lizzy ignoro sus problemas y los peligros que corría, volvía a casa flotando entre nubes, lo que sentia por el joven Jeremy era una ilusión indescriptible, única, los pensamientos estaban pegados a él a su recuerdo, su corazones exaltaba en su pecho, quería mirar sus ojos una y otra vez y que sus ojos se cruzaran pero se preguntaba si en verdad un hombre como ese realmente se fijaría en ella, o solo la consideraría como un juego.Era tan ingenua, Jeremy era ya un hombre. ¿cómo se fijaría en un chiquilla en una forma romántica? La flor que Jeremy le dio era tan pequeña como ella, quizás Jeremy solo era amable como una labor social, la veía tan desvalida.Se cubrió el rostro, como se le ocurrió confesarle que tenía una hija, seguro sonó tan desesperada por conseguir un padre o un esposo.Sintió que alguien la estaba vigilando, inspecciono todo su alrededor, recordó que Karola debía estar cerca, un escalofrió corrió por su espalda, apresuro su paso para volver a la casa.Sus ojos se desp