Estefan soltó el humo de cigarro, mirando aquellos árboles que, si bien no ha estado mucho tiempo por ese lado del Reino porque la familia real tenía su porción propia de bosque, los árboles eran los mismos, las mismas hojas, los mismos sonidos.Decir que estaba aterrado era poco, ver a la mujer que iba a dar a su hijo con un poco de su vientre abultado le puso los nervios de punta.—¿Estás bien?Joon apareció abrazándolo por la espalda y poniendo su cabeza en su hombro.—Si, perdón por lo último. No debí salir corriendo.—Es diferente para ti que para mí ¿cierto? —preguntó Joon—, lleva una parte de mi familia, pero no directamente de mí, en cambio, si es realmente tu hijo.Estefan gruño.—Ese niño es tan mío como tuyo. Maldita sea Joon, esta fue más tu idea que la mía, no me vengas con eso ahora.—Si, si, no digo que no piense que no es mi hijo —intentó apaciguarlo Joon—, habló de que biológicamente, debes sentirlo diferente. No te pongas idiota conmigo.Estefan resoplo.—Sentí algo

Leia miraba a su hija con ternura, ella movía sus manitas y miraba a su madre con una sonrisa contagiosa.—¿Entonces esperaras un poco? —preguntó Liam—, amor, sabes que puedes volver a tus estudios cuando quieras, tenemos mucha ayuda con Olivia.—Quiero quedarme cuidándola unos meses más —respondió Leia—, el tiempo pasa tan rápido, no puedo creer que ya va a cumplir cuatro meses de nacida.Los dos padres contemplaban a su hija con reverencia, no podían encontrar padres más enamorados de su hija en el Reino.—Ten en cuenta que dejaré mis deberes por un tiempo si lo que te preocupa es que Olivia se quede sola con…—Estás abarrotado de trabajo, a veces creo que tu papá te está dando todos sus labores—lo interrumpió Leia tomando su mano—, no te preocupes Liam, hago esto porque quiero. Volveré a mis clases para el próximo año de la carrera, no tiene sentido entrar a mitad de curso. Por el momento, seguiré disfrutando de los primeros meses de nuestra hija.Liam se llevó la mano de Leia a lo

—¡Esto es tu culpa!Taylor sujetó el cabello de Theo.—¡Tú me embarazaste! —exclamó Taylor sacudiendo con violencia a su esposo—, ¡¿Por qué soy solo yo la que sufre?!Cuando Taylor fue ingresada a la clínica y los demás se quedaron atrás, Estefan estalló en carcajadas, Gabriela no pudo evitar reírse junto a él, por efecto Bael se tapó la boca, pero las risas salieron de igual manera.—Ustedes tres son horribles —los regaño Liam.—Vamos, no puedes decir que eso fue muy gracioso —Gabriela se limpió las lágrimas—, debimos grabarlos.—Si mal no recuerdo, Liam me contó que hiciste lo mismo con Bael —dijo Leia tomando asiento en los sillones de espera que había en el lugar.Bael dejó de reírse y se estremeció con el recuerdo.—Si, casi nadie lo vio, en cambio Taylor ha estado golpeándolo desde que se le rompió la fuente —replicó Gabriela—, creo que tomará algunas horas, así que pónganse cómodos.—¿No creen que alguien debería ponerse en contacto con la madre de Taylor? —preguntó Leia.—¡Es

Se quedó mirándolo, era un bebé muy lindo en general, no es que él fuera experto en bebés.—Le gustas mucho a Gabriel —dijo Jessy mirándolos con ternura—, siempre se calma cuando lo cargas.Belial solo sonrió, aun no controlaba muy bien su fuerza. Así que se sentía nervioso cuando alguien le daba uno de los nuevos bebés. Los cuales eran varios, Estefan era el único que no quería que nadie se acerque a su hijo. Joon siempre estaba gritándole por lo sobreprotector que era. Gerard era su contraparte, había lanzado a su bebé al agua para que aprenda a nadar, la mayoría grito y se lanzó al agua cuando se habían dado cuenta que había hecho, pero para sorpresa de todos, el bebé flotaba riéndose descaradamente.El demonio completo miró a los ojos del bebé, era parecido a Bael como Dantalian, pero tenía los ojos violetas como Jessy. Unos ojos hermosos que hipnotizaban a cualquiera. Le pareció bastante irónico que se llamará Gabriel, contando que Gabriela casi mata a la madre del bebé, pero sus

—¿Dónde estamos? —preguntó Belial.—Está en una de mis guaridas, mi señor —Roux apareció haciendo una reverencia a Belial.—Un maldito hechicero —Belial se aproximó a una velocidad extremadamente rápida hacia el hechicero y lo tomó del cuello—, fueron ustedes los que nos dañaron hace años.—Este está a nuestro servicio Belial —hablo Mammón—, fueron otra facción los que crearon las armas para matar demonios nacidos de humanos.Belial soltó con tosquedad al hechicero y se volvió a ver a Mammón.—¿Realmente Lucifer piensa que va a salir victorioso en otra guerra con los celestiales? —Belial miro con asco al hechicero que se retorcía con dolor en el suelo—, porque si en algo estoy de acuerdo con la loca de Lilith, es que probablemente nos pateen el trasero como las otras dos primeras veces, que los malditos Tronos o Querubines van a dejarnos destrozados en la mejor de las suertes o simplemente nos atraviesen con esas lanzas ardientes que les dio el creador para eliminarlos de toda existen