* Relata Andrea Después de unas pocas semanas, las cosas cambiaron entre Julio y yo, (varias veces me vi llamándole Lucifer o cariño), él se volvió lo que siempre espere de él. Me lleva el desayuno a la cama, me trae postres y cosas deliciosas, de vez en cuando al ir a dormir, puedo sentir su mano en mi vientre que va creciendo rapidamente.. se que su tacto lo hace por hacerme sentir bien, pero me doy cuenta del cómo lo llama cuando me hace la revisión rutinaria. “El bebe”, quizás soy muy egoísta, también hipócrita un poco, porque también lo llamo así, quizás pueda entender un poco. Ninguno de los dos queremos encariñarnos, si él resulta ser un demonio. Aun así, Lucifer me da cariño y amor, quien podría imaginar que el mismísimo diablo tiene sentimientos y los tiene por mí, una simple mortal.Lo mejor de estos días, es que él me saca a pasear al campo que tenemos al rededor de la cabañita, mi estadía en este lugar ha sido muy lindo, no hay ruidos de la ciudad, todo por aquí es ver

*AndreaTenía tantos planes, quería ser modista, luego seguir creciendo hasta que yo tuviera mi propio negocio y verlo prosperar en revistas, pasarelas y ser exitosa.Tener novio no sería ningún impedimento para lograr mis objetivos, pero en el momento en que me dijeron de mi embarazo todo se detuvo, lo único que seguía avanzando era el crecimiento de mi vientre.Estaba sola, emocionalmente así me siento, el tener a un demonio a mi lado no me hace sentir completamente acompañada, era un sentimiento que en veces ni yo podría explicar. Entonces empecé a caminar alrededor de los muebles con el sentimiento de que las cosas no son lo que yo quería, Salí de casa y le di otras tres vueltas a la cabaña pensando en qué pasaría después de que naciera el bebé. Camine aún más alejándome de lugar, entre unos Pinos, adentrándome al bosque, Caminé y Caminé; y seguí caminando pensando en el nombre en que quizás podría darle al bebé, a mi bebé. Si es niña qué nombre le daría, tiene que ser un nombr

El silencio se apoderó de la habitación, solo el sonido que hacía el monitor de vida de Andrea sonaba en el lugar, el silencio era terriblemente sepulcral, nadie movió un solo dedo, cuando vieron a samanta en el piso llorando a mares con el niño entre sus brazos.El tiempo se detuvo por unos minutos, pero parecía haber sido eterno…Del bello rostro de la demonio Beka, había rodado una lágrima, su rostro estaba desdibujado por el shock y asombro de verse a sí misma llorando.Veronika regresó a su estado original. Se dedicó a ver al cuerpo de Andrea, cerciorándose que todo estuviera bien.Ernesto se había agachado en cuclillas limpiándose las gotas de sudor.Lucifer veía en dirección imperturbable a samanta, pero mil sentimientos paso por sus ojos y solo sus puños se cerraron con fuerza.Carlos miró como su novia lloraba de dolor en el suelo, este fue el único que se atrevió a moverse de lugar, agachándose frente a ella.— Sami, ¡ya linda!, dame al bebé— dijo con cariño.Samanta se afer

*Nolasca Me encontraba en una montaña alejada de la ciudad y del pueblo.Para ser más exacta es una mina de estalactitas enormes, era una cueva muy peculiar y lo suficientemente alejadas de ojos curiosos.Esa cueva no estaba lo suficientemente baja para que el humano promedio llegara a ella, por eso era nuestro punto de reunión.— Brujas, Lucifer, nos ha encomendado la tarea de encontrar a Rita urgentemente y eliminar cualquier otro aquelarre desconocido.— Nolasca y yo recorreremos…— No, tú y yo, no hay más nosotras,no pudiste contener a Julio con mi nieta.Ya no hay ningún “nosotras”Interrumpí a Estela, no podía explicarle mi razón de tratarla así, pero es que era necesario hacerles creer que algo andaba mal y que no la quería cercas.— Carmine y Sandra se vienen conmigo, las demás con Estela.Si bien no estaba molesta con Estela, pero si entre nosotras había alguien más que nos traiciona, tendremos que entregarlas, y teníamos que separarnos para hacer creer que podrían confiar

*Relata SamantaEscuche la voz emocionada de mi mamá hablarme varias veces a través de la puerta de mi habitación, hasta que abrió la puerta y literal se arrojó encima de mí.— ¡Vámonos Sami!, vamos de compras.Dormía tan a gusto en mi cama, y no quería moverme de ahí, pero mamá tampoco me dejaría en paz, así que perezosa me levanté y me dirigí al baño.— Mamá, háblale a Carlos que venga por nosotras— grite desde mi baño...*RecuerdoCuando estamos en el colegio de medicina, pasamos el tiempo trabajando a lado de nuestros tutores académicos o estudiando.Muy pocas veces he salido, y esas veces es porque Ernesto me corre, suele decirme que ya lo tengo fastidiado, sé que lo dice jugando, pero él es un hombre que también le gusta divertirse.La segunda semana de haberme integrado, nos invitó a Carlos y a mí a salir, por insistencia de Ernesto.Nos llevó a un bar/antro llamado “La Bohemia”.Descubrí que a pesar de ser un gran médico, es un excelente bailarín. Nos quedamos solo hasta la