— ¡¿Qué?!.
— Podemos agregarlo como un trabajo extra.
— ¡No! Me dijiste que verías como resolverlo.
— Lo sé y lo siento, pero no he encontrado la manera… — Edan suspiro frustrado. — No puedo simplemente rechazarlo, es el regalo que nos dejó mi padre en su lecho de muerte.
— ¿Y crees que el dinero lo resolverá?.
Edan no entendió la pregunta, ¿Por qué ella tenía que hacer de esto, algo complicado? ¿Era un trabajo, o no? Tal como el que Alma había estado haciendo hasta ahora haciéndose pasar por su esposa y seguramente, el dinero extra, no le vendría mal.
— ¿Cuál es el problema? Nos iremos el sábado, simularemos un poco para las fotos y volveremos el domingo, no es para tanto.
— ¿Qué no lo es? No puedo irme así como así, ¿Y mis hermanos? ¿Y mi madre?.
— Eso es fácil, trasladaré a tu madre a una clínica y la dejaremos con una enfermera personal, como ya habíamos quedado, a tus hermanos, los dejaremos con la niñera, como el día de la cena, ¿Acaso hubo algún problema con ella?.
— N