Pamela.
Ayer Alex vino a verme antes de irse a dar sus rondas por el perímetro pero en verdad extraño demasiado su compañía supongo que ya me acostumbré a estar cerca de él, ya que anoche prácticamente mi papá lo tuvo que correr de mi habitación para que él se fuera a hacer su trabajo pero hoy quiero darle una pequeña sorpresa y me arreglo un poco para bajar las escaleras con una sonrisa llena de dicha, mi hermana Ana está en la cocina haciendo la tarea y me mira pasar muy feliz.
-Y tú a dónde están de prisa.
Me detengo en la puerta al escucharla y la volteo a ver con sorpresa.
-Discúlpame señorita no sabía que usted era el oficial en turno para cuidar a los reclusos.
-No pero papá y mamá no están y si llegan queran saber dónde estás, así que dime y ro les pasó la información.
-Voy a ir a ver a Alex.
-Hay ustedes dos parece que nacieron de la misma madre no pueden estar separados ni dos días.
-Tu y yo somos de la misma pero somos completamente diferentes.
-Yo miro las cosas co