AMISTAD Y AMOR

-Me quiero bañar – le indico, me lleva dentro, me ayuda a quitarme la ropa, no me resisto, lo dejo que me ayude, me abro la llave del agua cuando me encuentro desnuda el agua cae fría sobre mi piel, contengo un grito por el contacto, me baño rápidamente porque no soporto lo frio, me cubro con la bata, antes de que de un paso fuera de la ducha soy alzada, llevada a la silla frente a de mi cómoda – lamento haber te cancelado la salida de hoy – pronuncio al verlo por el espejo – asiente con la cabeza a modo de respuesta – perdón por hacer te cuidar a una ebria – él sonríe – no me veas así que me siento peor-No puedo ver de otra manera a mi esposa – me gira en la banca se coloca a la atura de mis ojos – no tienes que soportar todo sola ahora Nicol, - me ve por uno segundos y besa mi frente – me tienes a mí, yo estoy aquí para ser tu apoyo &ndas

NOCHE DE LUCES

Observo con mayor atención y comprendo lo que tengo frente a mi es un árbolgenealógico, abro la boca para decir algo pero no sucede, frente a miestánlas generaciones pasadas de la familia deÓscar, leo cada nombre, en ese muro al menos hay siete generaciones, los primeros no hay fotografías, las siguientes cuatro veo fotografías pequeñas a momento de acercarme, nunca antes había visto yo un árbol tan grande, avanzo paso a paso hacia quedar al frente y veo comoaúnhay espacio para algunos otras personas, veo el nombre de Oscar y Ernesto, a su lado hay un espacio disponible con la plaqueta en blanco, nosési correr o llorar de miedo, mi gargantaestáseca, en mi pecho siento una opresión tanto que comienzo a creer que soy incapaz de llenar mis pulmones de aire.

EXCURSION

Cinco minutos antes de que el despertador sonara, me levante de la cama para ir al baño, estoy vistiéndome en este momento, no he detenido la alarma con el único objetivo de que se despierte Óscar, un par de pantalones, zapatillas deportivas, una playera de manga larga, una sudadera y una gorra, la última vez que fui a una excursión fue cuando estaba en el colegio, con ese único recuerdo me dirijo a la cocina y meto dentro de mi maleta mi botella de agua, un par de galletas y unos cuantos dulces, la dejo sobre el mueble, veo a la abuela vestida con un pantalón, una blusa a cuadros, un sombrero y unas muy cómodas zapatillas deportivas – te ves muy elegante abuela – le digo-Gracias - me abraza – y ¿tu esposo? – no respondo – anda ve a levantarlo que no tenemos mucho tiempo – sonrió en comprensión por lo que avanzo al dormitorio, sigue dormido y el sonido de l

¡INICIO DE SEMANA!

Intento moverme para poder despertarme, pero eso es imposible, bostezo e intento nuevamente la acción anterior sin éxito, abro los ojos y veo una mano rodeando mi cintura, intento recordar algo raro la noche anterior, no recuerdo nada raro solo yo mintiéndome entre la cama – deja de moverte – dice una voz adormilada a mi espalda y reconozco esa ronca voz -A ¿qué hora llegaste? – giro y quedo frente a frente a Óscar entres sus brazos, lo muevo para que despierte – son las seis de la mañana me desperté sin que suene la alarma, me estiro para apagarla justo cuando el sonido estridente hace presencia, no llego por lo que lo empujo y quedo sobre él, sin darme cuenta que uno de mis senos queda sobre su boca, siento su aliento sobre la tela y mi vientre reacción rápidamente que se estremece, me muevo y solamente agravo las cosas porque el con su boca sube mi blusa y ahora su boca esta sobre mi piel y mi sexo palpita por atención, todo mi seno está dentro de su boca su lengua

LA SEÑORITA DE LA CASA

Abro la puerta de mi casa con la llave de la casa en la sala no hay nadie y me parece extraño, Denis me ve y yo me encojo de hombros porque siempre somos recibidas por mi abuela en la puerta cuando llegamos a casa, siempre ha sido así desde que voy a la escuela – donde esta la abuela – cuestiona y yo le hago una señal para avanzar, llegamos al comedor aun conversamos sobre lo que esta sucediendo en la agencia, veo a mis abuelo en primer lugar, al entrar mas la felicidad que tengo se me vuelve amargura, en mi estomago se hace un hueco expulso el aire por la boca.-han venido visitas – dice Amelia y esta sentada a la par de mi papa que se encuentra al otro extremo de la mesa, Carmen se sienta en mi lugar, sonrió antes sus palabras-Buenas noches – hablo como si ella nunca hubiera pronunciado palabra, me acerco a mi abuelo que tiene mala cara y al verme se le desvanece – no sabia que teníamos invitados en ca

A TU GUSTO

-Vamos a comer – sonrió – yo invito – sus ojos expresan incomodidad – no creí que fueras de los hombres que no les agradan las invitaciones de mujeres – le digo con sarcasmo - vamos solo es una comida -No es nada de eso – asegura – solo que estas evitando el tema – me acusa, me conoce tan bien que dudo que pueda al menos fingir ante sus ojos. -Puede que lo piense – es lo único que puedo pronunciar, lo veo con detenimiento – ¿entonces vamos a comer? – su gesto afirmativo va acompañado de un beso en la mejilla, me coloca sobre mis pies toma mi bolsa y avanzamos hacia la salida, todos ya se han ido el edificio se encuentra en completo silencio, tengo el lugar perfecto para llevarlo a comer, le pido las llaves del auto, se niega a dármelas, las necesito porque él no conducirá a donde quiero llevarlo, me acerco a él en su busca, lleva una chaqueta palpo sobre la tela las llaves, sin éxito alguno, no se mueve parece complacido con mis acciones, lo busco en las bolsa

HOSPITAL

La alarma programada de las cinco de la mañana hace su ruidosa aparición, abro los ojos no muy feliz me muevo en la cama, Óscar se queja por interrumpir su sueño, logro salir de sus brazos entro a la ducha, hago lo correspondiente en tiempo récord porque debo llegar a tiempo a la agencia para montar todas las cosas en la camioneta, ayer llegamos tarde a casa así que fuimos directo a la cama, elijo una blusa color azul cielo de tiras traslapadas sobre el pecho, un pantalón color negro, unos converses color azul cielo, una sudadera del mismo color, tomo mi maleta de mano que contiene todo mi maquillaje, sago en silencio porque no quiero despertar a Óscar no sirve de nada, la luz de la mesita de noche se enciende – en cinco minutos estoy contigo en el auto – pronuncia con naturalidad, hago un gesto afirmativo, salgo de la habitación, bajo las escaleras, arrastro la maleta hasta el garaje donde se encentran

SORPRESA

Dormir es lo único que tengo en mente al cruzar la puerta que me separa del pasillo y el dormitorio, el primer paso es lo que me brinda luz verde para despojarme del vestido, zapatos y el peinado que con el peso hace que me duele el cuello, lo primero de lo que me deshago es de los altos zapatos blancos que atormentan a mis pies, dejo caer la tela que cubre mi cuerpo, completa cae a mis pies, busco una pijama, encuentro un camisón el menos sexi que pueda tener fue una compra de urgencia en una ocasión que estuve fuera de casa en una sesión de fotografías, olvide meter mi pijama para dormir el único lugar cerca era una tienda de ropa de adolescentes la talla era justo la mía es color lila tiene dos pequeñas bolsitas al frente, el ruedo está decorado con una fila de pequeñas florecitas, cubierta solo con esa prenda me siento frente al espejo para desmaquíllame, escucho el sonido de los pasos de Óscar e