—¡¿Qué haces aquí?!
Paolo no respondió de inmediato, en su lugar caminó hacia el interior de la oficina de Loredana observando los detalles.
Se detuvo frente a su pequeña biblioteca y leyó los títulos. Reconoció la mayoría de ellos. Todos los libros estaban relacionados con administración de negocios y economía.
—Paolo —insistió ella.
—Vine a recogerte —dijo con voz plana—. Tenemos una cita. ¿Recuerdas?
Había estado seguro de que Loredana lo trataría de esquivar, es por eso que no había ido a buscarla a su casa, sabía que ella no estaría allí. El otro único lugar que se le ocurrió fue su lugar de trabajo.
—No recuerdo haber accedido a eso.
Sonrió divertido, pero se recompuso antes de darse la vuelta.
Loredana lo estaba fulminando con la mirada —se estaba acostumbrando a eso.
Acortó la distancia que los separaba y apoyó las manos a ambos lados de sillón de oficina dejándola sin escapatoria.
El semblante de Loredana no cambió. Era muy buena fingiendo, pero él era mucho mejo