ALFA RASTUS;

De alguna manera, me encontré en la casa de Andrew a pesar de que planeaba regresar a Agnes y pasar el día con ella después de bañarme.

Inicialmente, Seth nos llamó a Andrew y a mí a una de las salas de almacenamiento de la manada, donde descubrimos que la información de Jake sobre el almacén de Nolan fue útil.

Conseguimos las armas antes de que Larisa pudiera vaciar los almacenes.

También conseguimos algunos electrodomésticos modernos de humanos y manadas sin tener que pasar por alfa Clinton.

Agradezco a los guerreros que hicieron esto posible y a los rastreadores de lobos blancos que los acompañaron.

Pero después de que ordenamos todas las armas y aparatos que trajeron, Andrew me llevó a un lado.

—¿Puedes cenar conmigo, Otis y Susanna?

—¿Por qué querría estar allí? —pregunté de inmediato, dispuesto a rechazar su invitación porque me di cuenta de que estaban cenando juntos para hablar sobre el tema del triángulo amoroso.

—Porque necesito que me apoyes —confesó Andrew—. V