Charlotte se quedó muda por unos segundos mientas hacia una mueca con sus labios, ya que aún no se sentía lista para contestar esa pregunta a nadie… ni siquiera a su hijo.
- Am… ¿por qué preguntas? – le contestó con otra pregunta.
- Es que los frecuento diario y jamás lo he visto e igual puedo notar que en la casa solo hay cosas de ustedes.
- Lo que pasa es que Arturo solo tiene una mami.
- ¿Él te abandono? – preguntó el frunciendo ligeramente el ceño.
- No exactamente, digamos que es algo complicado de explicar por ahora.
- Me lo explicarías más adelante.
- Supongo que sí, así como tú me contaras sobre tu extraña y rara relación con Elizabeth – mencionó recordando las amenazas de esa mujer.
- Me parece un buen trato – indicó James imaginándose porque lo decía - bueno descansa.
- Tu igual y maneja con cuidado.
- Hasta mañana – dijo atreviéndose a acercarse a ella para darle un beso en la mejilla.
Charlotte se sonrojo por esa acción mientras le miraba subirse a su auto para