CAPÍTULO 37
Elliot se había quedado dormido en el sofá, en la mesa frente a él se encontraban dos botellas de vino vacías, bebió hasta perder el conocimiento. Cuando el sol entro por las ventanas y golpeo su cara, se despertó.
Su cabeza parecía que iba a estallar, se puso de pie tambaleándose y fue