El hombre cayó al suelo, pero había tranquilidad y una sonrisa en sus ojos.

El revólver en la mano de Robbie dio un giro. Cuando los varios jefes de división dieron la orden de asesinar, Robbie apuntó con el arma de repente hacia la bombilla.

Entonces, se escuchó un fuerte estallido. La bombilla estalló y los cables se incendiaron. El chispazo del fuego crujió a lo largo de los cables, y pronto se escucharon los sonidos de una serie de bombardeos dentro del edificio.

La escena ocurrió en un abrir y cerrar de ojos.

Cuando Savannah escuchó el ruido proveniente de atrás, giró la cabeza conmocionada y vio que el pequeño edificio ardía en llamas. Todos los que estaban reunidos alrededor del pequeño edificio estaban ahora reducidos a cenizas en el mar de fuego. Solo había unos pocos supervivientes.

“¡Robbie!”, gritó Savannah de repente de forma desgarradora.

El pequeño edificio se derrumbó y el sonido de la explosión se escuchó a decenas de kilómetros de distancia. Cuando la división d