Desquitarse nunca se sintió tan bien.
Theo.
__ Te dije que te llevaras las llaves. - dijo la mujer en bata que salió a abrir la puerta.
Se quedó en silencio cuando notó que era yo y no su hermano de seguro a quien esperaba.
__ Señor O'kelly ¿Que hace aquí? Creí que no sabía...
__ ¿Donde está tu hermano? - directo al grano argumenté a su comentario.
__ No sé de qué habla. No vivo con mi hermano cómo puede ver. - bajó los brazos para volverlos a cruzar. - ¿Quien le dio mi dirección?
__ Tengo la certeza que está aquí. - manifesté y se tensó. - ¿Donde está?
__ Pues no lo ve aquí por lo que puede notar. - reafirmó dándose la vuelta. - Si tiene buenas fuentes debería saber que aquí no está, a menos que sea una excusa.
__ ¿Excusa para que voy a necesitar? - estiré el cuello para ver el fondo. No sentí lo que estaba haciendo hasta que sus brazos se colgaron de ese sitio.
__ Para buscarme. - declaró alzándose sobre sus puntillas para alcanzar mi boca. - Después de verme en el hotel, de seguro se arrepintió de haberme rechazad