Lo que son las cosas

Mara estuvo bien por varias semanas, los ingresos qué tuvo por mucho del tiempo dentro el club le ayudaron a sobrevivir por unos meses mientras se tomaba esas vacaciones, lo que le intrigaba era por que ya no supo nadamas de su galán, le pareció que perdió el interés muy fugaz, tal vez debía de haberse portado como toda la dama qué el quería que fuera, pero ella solo no podía permitirse dejar de ser quien era, casi se acercan las fiestas navideñas y se acerca la fecha más infeliz de su vida, le seguía doliendo aun la pérdida de su pequeño hijo, pensaba que no se podía permitir la felicidad de ser madre de nuevo y temia qué si pasara el recuerdo de su hijo se iría.

Simple te empezó a ocupar su mente y se dedico a buscar otro empleo, tenía muy claro que no quería volver a la vida nocturna así que sin pensarlo acepto un empleo como mesera en un restaurante muy lujosos llamado La femme.

POV MARA.

Diablos me duelen los pies, el dinero fácil valla que si es fácil.

- señorita Romell - gritaba uno de los chefs - señorita Romell ya salen sus platillo!!!! - repicaba con fuerza

-enseguida chef - le contesto saltando de la rejilla de sodas qué había en una bodega

- qué disfruten sus paladares - aprendí a decir las palabras para los comenzales mientras me retiro por los siguiente platillo.

- buenas baches, bienvendos a él La femme - doy la bienvenida mientras saco mi Block de notas.

- podría traerme una de sus mejores botellas de vino-

- claro, gusta pedir algún pla........

Y de inmediato me tiro al piso como si fuera algún ataque

-señorita se encuentra bien - pregunta un comenzal de la mesa continua.

- si gracias, disculpen solo un mareo, disculpen, lo siento - qué estabas pensando marita?

No pudiste mejor haberte disculpado dar la vuelta ir a la cocina y retirarte con el pretexto de estar indispuesta, me reclamo interiormente pero me distrajo esa voz fría y penetrante

-señorita Tamara un gusto encontrarla en este lugar - resonaron las palabras en mi cabeza mientras me tomaba de los brazos para ayudar a levantarme.

- un gusto señor Müller - levanto la mirada solo para ver su rostro sonriente - qué pena, disculpe -

-claro tomaré en cuenta esa disculpa solo por el hecho de tirarse al piso en cuanto nuestras miradas se cruzaron - me susurraba al oído mientras me recargaba en su regazo al levantarme.

- también por eso me disculpo, un reflejo de cuerpo y mente no coordinados con la idea de esfumarme -

- jaja, vaya me siento alagado de ser la causa de cierto choque en su cuerpo - me sonrojo de nuevo mientras caminamos hacia la cocina.

- en verdad lo lamento, yo no sé que otra cosa pudiera haber hecho -

-no lo sé que tal si después de tirarte te hubieras arrastrado como soldado en trinchera, ahí si creería que huias de mi -

- bueno ciertamente pensaba ponerme en la cabeza algún garrón de un centro de mesa - me rio mientras se nos acerca el gerente.

- qué paso ahí afuera señorita Romell? - gritaba el gerente furico.

-disculpe señor - replicó mientras me pongo de píe y Ares me tomaba de la cintura para no dejarme caer al piso después de darme cuenta que realmente me había lastimado un tobillo.

-! Me importa un carajo ¡- seguía levantando la voz.

-disculpe esa no es la forma de tratar a sus empelados aun más cuando se trata de un accidente -

- quien es ud, no debería estar aquí -

-Hallad Müller caballero-

-me importa poco quien sea, no está permitido su accesó a este lugar-

-me retirate cuando vea que le da....... - le interrumpo a mi galán

-Ares, no sigas, esta bien -

-si gusta ud puede llevársela -

-claro que será así, es una de sus empleados, deben atenderla -

- muy bien pues puede llevarsela esta despedida-

Miro a ares a los ojos miéntras el me toma y carga sobre sus brazos. No supe ni que decir ni siquiera pude espetar nada.

-pero que carajos te pasa? - le empiezo a golpear con mano abierta en su pecho

-disculpa, solo quiero que te vea un médico -

-gracias por eso, pero me refiero a que te sucede con este van dos empleos qué pierdo por tu gran culpa y forma de actuar -

-mi forma de actuar - se reía a carcajadas mientras me acomodaba en el asiento trasero de su auto.- disculpa pero quien se tiro al piso fuiste tu -

- no te burles, fue reacción en acción -murmuraba como niña pequeña mientras hacía puchero y se me encendía las mejillas

-al hospital Frank, por favor -

-disculpa pero sería mejor que fuera a un simple consultorio - agache la mirada y pensaba en lo costoso qué podría ser un hospital y la idea de pisar uno de nuevo me estremecía el corazón.

- no está bien iremos al hospital un buen médico te revisara y si es por lo económico, creo que la bomba qué cuaso tu caída lo asuma - aun se burlaba de mi

- dije que no! —alze la voz sin pensarlo - preferiría que me dejara en cualquier lugar -

- bueno, esta bien, no es necesario tal nivel de furia en un cuerpo tan pequeño como el tuyo hace daño -

- disculpa no fue mi intención -

-Frank vamos a mi oficina hay servicio médico -

- ok, hay médico en donde trabajas -

- asi es, me preocupa el bienestar de las personas que trabajan para la empresa así un servicio médico dentro de ella es algo bueno -

- qué bueno no todos los lugares piensan en las personas y menos en sus familias -

- listo, llegamos -

En cuanto me cargo en sus brazos, sentí que me volvía una hormiguita, aquel edificio era enorme y parecía hecho de espejos, pero mientras llegamos a la recepción solo pude mirar aquellas letras " M & J Medical Laboratories" la empresa reconocida mundialmente por ser una de las vanguardistas en insumos médicos, tanto equipos como todo tipo de fármacos.

- aquí trabajas?- preguntaba mientras volteaba a todos lodos como niña pequeña.

- así es, es bonito verdad -

- ¡es enorme! -

- bienvenido señor Halladed, no lo esperábamos hoy, le ayudo en algo? - preguntaba una mujer de cabello relamido, delgada como un hilo y de porte sumamente educado.

- gracias solo avise al servicio médico que voy subiendo por favor -

- vaya te conocen muy bien para ser un empleado cualquiera -

- claro que lo conocen, es el presidente de la compañía, sin dejar de un lado qué su madre y su padre son los dueños de semejante imperio - sonríe Frank mientras oprime el botón del ascensor.

Volteo mi mirada hacia Ares con una expresión anonadada mientras el pone cara de niño encontrado en un juego de escondidas, volteo a ver a Frank y me sonríe divertida ente, en que terrenos estoy parada, era dificil no esbozar una sonrisa nerviosa después de lo que me había enterado, cuando mi suerte decidió arrojarme contra un multi billonario, y que hacia yo ahí vaya que no se síes buena o mala surte.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo